Algunas de las iglesias destacadas de la comarca están en obras

Santiago Garrido Rial
S. G. Rial CARBALLO / LA VOZ

CARBALLO

J. M. CASAL

Fisterra y el monasterio de Soandres acumulan las principales inversiones

12 may 2015 . Actualizado a las 18:04 h.

Algunas de las principales iglesias de la Costa da Morte (hay casi 160, capillas aparte) están en obras, o lo han estado recientemente. Y, en determinados casos, con inversiones muy importantes. La que más, la de Fisterra, donde la Xunta emplea más de 300.000 euros (más del 80 % son fondos europeos Feder). Los trabajos de mejora afectan al interior y al exterior del templo.

También están en marcha los trabajos de restauración del interior del monasterio de Soandres, para los que la Consellería de Cultura aporta 166.000 euros, destinados a resolver problemas de humedades, mejorando la ventilación.

En Cores-Ponteceso, están a punto de acabar las obras del templo, también con una cantidad importante: 144.050 euros. No muy lejos, en Brantuas, también ha habido actuaciones destacadas en la capilla de la Torre do Faro.

En Agualada, las aportaciones vecinales permitieron sufragar (23.000 euros en total) el cambio del tejado de la iglesia. En la de Carballo van mucho más allá: incluyen suelo, iluminación y pintura. En total, unos 76.000 euros. En el mismo municipio concluyó hace tiempo la reparación de la de Entrecruces, y estos días está a punto de terminar el arreglo, todo en piedra, del perímetro exterior en su conjunto. Además de estos proyectos, con frecuencia se realizan otros menores (pequeños arreglos, retablos...), que se anuncian en el Boletín Oficial del Arzobispado.

Monasterio larachés. Además de solucionar problemas de humedades y de ventilación (los operarios están construyendo una banda de aireación perimetral en muros y pilares), las obras incluyen el rediseño de la iluminación interior y la colocación de una nueva escalera de acceso al campanario. Los trabajos avanzan a buen ritmo.

Santa María das Areas. El proyecto de reforma (la tercera en 14 años) lo dirige el arquitecto César Portela. De base románica (siglo XII), incluyen la reposición y adecuación de cubiertas, limpieza manual de muros, refuerzo de algunas estructuras o reposición de piezas de sillería.