Los campos de golf encallan en el pozo de la crisis y los permisos

Juan Ventura Lado Alvela
J. V. Lado CEE / LA VOZ

VIMIANZO

Parcelas de Castrelo (Vimianzo) donde el Concello investiga si se ha invadido un camino vecinal a la hora de cerrar el campo.
Parcelas de Castrelo (Vimianzo) donde el Concello investiga si se ha invadido un camino vecinal a la hora de cerrar el campo. ana garcía< / span>

El área privada de Vimianzo, investigada por invadir un camino

09 feb 2015 . Actualizado a las 05:00 h.

Los proyectos de desarrollo, sobre todo urbanístico, asociados al golf en la comarca, que tan felices se las prometían hacen menos de un lustro son hoy solo una sombra de aquellas ilusiones, con dos casos paradigmáticos, el de Cee y el que un promotor madrileño inició en Vimianzo, en principio sin los necesarios permisos municipales. En el primer caso, esta semana, al fin, parece que habrá solución, ya sea en sentido positivo, como espera el gobierno municipal, o para rechazar la idea definitivamente, que es hacia lo que se inclina más varios representantes de la oposición.

Mientras, la finca vimiancesa de Castrelo, acondicionada en parte para este fin, sigue pendiente de un expediente de investigación abierto por el Concello, que el mes que viene cumplirá cinco años y del que todavía no se espera un resultado definitivo de manera inmediata.

Según explicó ayer el alcalde, Manuel Antelo, están recopilando información, sobre todo los documentos de propiedad que puedan tener los lindantes con las parcelas en las que se ubica el campo, para determinar si, efectivamente, y como denunció en su día la asociación de vecinos, se ha invadido el conocido como camino público de Estorrontada, en Cerbán (Castrelo), detrás de Caolines, que es donde se ubican las instalaciones en cuestión. Unas obras que se limitan a algunas casetas y el cierre, que habrían sido realizadas de manera irregular.

«O que está claro é que licenza non a ten, e calquera actividade deste tipo debe contar con ela. Polo tanto é ilegal», incide Antelo, que reactivó la tramitación de este asunto en septiembre del año pasado, después de que ya lo iniciase el anterior gobierno y que el asunto quedase olvidado.

Niega irregularidades

Por contra, su propietario, Luis Vicente De Lorenzo Santos, madrileño con raíces de A Ponte do Porto, mantiene un punto de vista diferente sobre la situación real y quiere despejar cualquiera de la dudas sembradas, como que pudiese estar actuando de testaferro para otras personas o que tenga intención de llevar a cabo aprovechamiento económico alguno de este terreno.

«Cuando me jubilé tenía un dinero y en lugar de meterlo en una casa o en un coche, compré la finca, porque en Madrid soy de jugar a diario y como paso los veranos, julio y agosto sobre todo, en Camariñas y tengo un hijo que vive en Cee, pues quería contar con un sitio. La finca que compré, que ya estaba delimitada con su cierre de piedra, no me daba para hacer lo que se conoce como un par 5, para lo hacen falta entre 400 y 500 metros de largo, así que adquirí otras que estaban pegadas» sostiene De Lorenzo, que no ve nada irregular en su actuación y añade: «En mi caso lo único que quiero es jugar con mi mujer o con mis amigos las pocas veces que vienen desde Madrid, porque aquí lo más cerca que teníamos está en Santiago, a 60 kilómetros. No creo que haya hecho nada ilegal, ni cerrado ningún camino, porque el paso que había no conduce a ninguna parte, solo a las que ahora son mis fincas, y no lo eliminé ni nada, simplemente lo dejé pegado a un extremo, como parece lógico», incide el golfista aficionado, que afirma que le ha dado a la Administración las explicaciones que ha pedido hasta el momento, y que seguirá haciéndolo, porque su idea es que quede plenamente regularizado.

Además, De Lorenzo destaca que en la Costa da Morte, con un terreno de 300 metros de largo por 200 de ancho, se podría hacer perfectamente una instalación comercial explotable porque «es un deporte que practicaban desde Franco al Che y en el que puede participar todo el mundo: niños, jóvenes y mayores». En cualquier caso, resalta que esa no es su intención, porque lo quiere para uso privado, aunque se muestra dispuesto a invitar a cualquier aficionado de este deporte de la zona que se lo pida.

La empresa de Cee ofrece menos de la mitad de lo que pide el Concello

La empresa levantina que tiene adquiridos más de dos millones de metros cuadrados de suelo rústico en el monte de O Son y que pretende, o pretendía, desarrollar un ambicioso complejo de golf, hoteles y edificios residenciales está en estos momentos negociando con el gobierno de Cee la elaboración de un convenio que lo hago posible.

Según informó ayer el concejal de Urbanismo, Isidro Caamaño, a lo largo de esta semana espera tener sobre la mesa la propuesta definitiva de los promotores que, por el momento, se aleja bastante de las exigencias municipales. «Como xa se falou nunha comisión, nós pediamos 1,5 millóns de euros e eles agora están no entorno dos 600.000 e ademais hai tamén outras cousas que perfilar», señaló Caamaño, que insiste en definir como «moi importante para Cee e para toda a comarca», pero añade que no puede condicionar la elaboración del plan general del Concello.

«Nós seguimos coa idea de sacalo adiante, pero nesta semana imos tomar unha determinación. Se sae, ben, e se non, tamén porque o resto do PXOM témolo listo, despois de ano e medio de traballo e de reunións, e confiamos en que nun par de meses se poida enviar á Xunta», explica el edil.

De este modo, y si finalmente la oferta es rechazada, la única opción viable de campo de golf que queda en la comarca es la que va asociada al parador de turismo de Muxía y la que ya funciona de la modalidad Pitch & Putt, más modesta y accesible a aficionados primerizos, en el municipio de Carballo.