El Semáforo de Fisterra saldrá a concurso por 1.000 euros al mes

FISTERRA

Sillas apiladas en la entrada del Semáforo que da a la terraza, en frente del Faro Fisterra.
Sillas apiladas en la entrada del Semáforo que da a la terraza, en frente del Faro Fisterra. alvela< / span>

La concesión por 15 años prima el pago adelantado y la calidad turística

04 feb 2015 . Actualizado a las 13:39 h.

El negocio hostelero a todas luces mejor ubicado de la Costa da Morte, con un pequeño hotel, restaurante, cafetería y otro bar independiente, tendrá pronto dueño y además por los próximos 15 años. Eso sí, después de que el interesado desembolse, como mínimo, los 216.000 euros, IVA incluido, que el Concello de Fisterra exige por el emblemático Semáforo y del bar O Refuxio, situados en pleno Cabo Fisterra, con vistas inmejorables del Faro, la ría de Corcubión o el Monte Pindo.

Los criterios de adjudicación, que ayer a mediodía aprobó la corporación municipal con el voto en contra del BNG y muchas reticencias por parte del PSOE, fija el equivalente a 1.000 euros mensuales de alquiler más impuestos durante esos tres lustros y prima criterios principalmente económicos aunque también técnicos. De hecho, según dice el alcalde, José Manuel Traba, quieren que, por el simbolismo que tiene, el Semáforo «sexa unha aposta pola calidade turística». De ahí que los 50 puntos de valoración que tendrá en cuenta la mesa de contratación, en la que el BNG ya ha anunciado que no estará, se reparten 20 para la mejor oferta económica, 10 para el que adelante una parte mayor de los 216.000 euros y 20 para el mejor proyecto de explotación turística. Un plan que, con casi total seguridad implicará otro aporte de dinero importante, porque el inmueble necesita una reforma interior en profundidad, si el objetivo es dar una oferta en consonancia con su historia y con el privilegiado espacio que ocupa. Cantidad que algunos profesionales consultados ayer cifraron en torno a los 50.000 euros.

Más barato que los suvenires

El regidor defendió ayer, ante las críticas de los opositores, que los términos del pliego de condiciones son prácticamente calcadas a las de la concesión anterior, aunque, evidentemente con los precios actualizado, ya que los 15 millones de pesetas de entonces (90.000 euros por 15 años) hacían que el alquiler del Semáforo fuese más barato que el de los puestos de recuerdos del acceso al Faro.

Además, Traba justificó que se premie el pronto pago porque así «o Concello recupera nun espazo de tempo breve o diñeiro que agora ten que investir», ya que estos días está acometiendo las obras necesarias para dejarle el inmueble a quien gane la concesión en unas condiciones mínimas. Unas actuaciones que pasan por la instalación de las ventanas dobles que ya estaba en el proyecto original y que nunca se colocaron, el cambio de las puertas, las reparaciones de carpintería y el pintado de las estancias. Trabajos que para el portavoz del PSOE, José Marcote, profesional del sector, son incluso «absurdos» porque el que coja un local de estas características «quererá poñela á súa maneira». Sin embargo, sus críticas se centraron más en la premura y la falta de consenso en algo tan simbólico, por lo que su grupo justificó el voto favorable, para que el que gane no pierda la campaña de verano.

Mucho más contundente fue el nacionalista Xan Carlos Sar que pedía una concesión máxima de 10 años, más transparencia y flexibilidad en el pago, como ocurre en Estaca de Bares, porque la ventaja para el que adelante el dinero juega en contra de las pequeñas empresas de Fisterra y del resto de la comarca.