«Lo peor que le puede pasar a un concello es carecer de planeamiento»

CARBALLO MUNICIPIO

JOSE MANUEL CASAL

Asegura que no entendería un rechazo al PXOM por parte de la oposición

01 feb 2015 . Actualizado a las 05:00 h.

El Plan Xeral de Ordenación Municipal (PXOM) de Carballo afronta mañana un día crucial: el pleno someterá a votación su aprobación provisional. El grupo de gobierno (BNG), en minoría con 10 de 21 ediles, ha anunciado su voto favorable. Necesita 11 «síes», pero por ahora la oposición no ha revelado su postura. Al frente del equipo redactor del documento (30 kilos) está el arquitecto Álvaro Fernández (Palencia, 1960), vecino de A Coruña.

-Es un momento clave.

-El plan es muy importante para cualquier término municipal, pero en Carballo se suma tener anulado el PXOM del 2003. Aquí, su aprobación es un acto de responsabilidad. Lo peor que le puede pasar a un concello en urbanismo es carecer de planeamiento y el documento de este plan, con su redacción condicionada por los cambios legislativos, se hizo de forma muy consensuada con todos los grupos políticos.

-¿Le sorprendería entonces la oposición no apoyase este plan?

-Creo que carecería de explicación. Las resoluciones se adoptaron por unanimidad y con absoluta colaboración entre técnicos y grupos. Se recogieron todas las iniciativas que se podían recoger. Sí sería penoso pensar que pueda ser por motivos políticos, pero sinceramente no encontraría otra explicación. Sería un acto de absoluta irresponsabilidad. El planeamiento es un ejercicio de derechos y de obligaciones y, este, un documento muy equilibrado. Por la experiencia que tengo, que es bastante, Carballo ha sido, con diferencia, el ayuntamiento donde más han participado grupos políticos, entidades y ciudadanos.

-Pese a que haya cuestiones que, a lo mejor, puedan mejorar.

-Tienes que demostrar la viabilidad económica de lo que pintas. ¿Se podría hacer un proyecto más ambicioso en espacios públicos, dotaciones...? Seguro que sí. Pero lo que se pinta hay que pagarlo.

-Fue, por ejemplo, muy comentada la previsión de viviendas nuevas.

-En su día se preveía la posibilidad construir 39.000 viviendas, pero cualquier estudio que se haga, y así lo recogieron los informes, lo consideraría excesivo para una población de 31.000 habitantes. Hubo que ir adaptando el planeamiento anterior a ese criterio. Ahora se prevén 10.000 viviendas nuevas, reserva más que suficiente para los 16 años del plan. El planeamiento hay que entenderlo desde una forma dinámica, tiene que recoger las tensiones sociales y económicas. Hacer hoy una previsión de cómo funcionará el mundo dentro de 16 años requiere ser prudente, tener en cuenta la base del crecimiento de una ciudad y un término municipal tan grande como es Carballo.

-Y que ahora se rige por unas normas desfasadas de los 80. ¿Y si mañana no se aprueba el plan?

-La situación jurídica que se generaría sería casi una aberración ridícula. Pensar que Carballo se puede regular ahora por unas normas de los ochenta, con el plan del 2003 anulado... ¿Qué pasaba? Que mientras se hizo la tramitación de este plan estaba en vigor la suspensión de licencias [concluida a finales de este mes]. ¿Qué nos estaba diciendo esa suspensión? Que hoy hay zonas verdes y zonas que son viales que en el planeamiento del año 80 eran parcelas edificables. Dicho así, por tanto, la situación que se podría generar está carente de lógica. Con el espíritu de que Carballo necesita un plan es con el que se ha redactado este documento y durante la exposición pública se ha hecho un gran esfuerzo para explicarlo. La legislación establece ahora muchas más cautelas que en su momento. Por tanto, había sectores y zonas clasificadas en su día como urbanizables y edificables que había que desclasificar, por diversos motivos. Son criterios genéricos que de forma individual todos compartimos, pero que cuando nos los aplican a nuestro terreno, nos cabrea. De ahí el esfuerzo por explicarlo. Creo que sí se entendió que la ordenación del suelo hay que hacerla con sentido común.

-Y más con las especificidades que tiene Carballo en ese sentido.

-El problema de su planeamiento es que la planta, lo que ya ocupa la ciudad de Carballo es superficie, es una extensión muy grande en relación con la población que aloja. Lo que hace este nuevo plan es completar la malla y la trama urbana existente. Como es muy grande y quedan muchos solares por edificar, da lugar a que el número estimado de viviendas sea alto. Este proyecto del plan es muy contenido en cuanto a transformación de suelo y tenemos que ser consecuentes con lo que ya está hecho. De ahí que casi se hayan eliminado los sectores de suelo urbanizable y solo se mantengan aquellos que completan la trama. Luego, están los desarrollos en suelo urbano no consolidado: en palabras sencillas, es desarrollar las bolsas de suelo que quedan dentro de la ciudad.

-¿Le sorprendió la cifra de viviendas vacías y a medio hacer?

-Mucho. En todos los municipios donde se hace planeamiento se da esa situación, pero el porcentaje de esas viviendas en Carballo es bastante más alto que en otras zonas.

-¿En qué medida un PXOM, este mismo, puede mermar el feísmo?

-Los pueblos los hace su gente. Hoy, a diferencia de hace 20 o 30 años, queremos que la edificación, de la que antes solo se buscaba su valor funcional, tenga un componente estético, para que el conjunto de la ciudad esté mejor. El plan, efectivamente, contempla eso. De hecho, creo que es el único punto de debate que queda en este momento. El plan establece, primero, que los edificios se rematen y, segundo, que se hagan de acuerdo con las previsiones del plano. Que la ciudad tenga una lógica de alturas y de espacios libres, que las alineaciones sean obligatorias... parece razonable.

-¿Y ha quedado bien el litoral? Fue otro de los puntos calientes.

-Pensamos que sí. La ordenación del litoral en Carballo está sometida a una tensión fácil de explicar: por un lado, el interés general; por el otro, el particular. Cuando de forma genérica hablamos de sostenibilidad no hay nadie que no esté de acuerdo, pero cuando lo reflejas en un documento significa que hay parcelas que no se pueden edificar porque están pegadas a las playas o en zonas de grandes valores naturales. Planeamientos anteriores sí lo posibilitaban, y modificar ese criterio ha generado tensiones.

-Carballo necesita un PXOM, pero algunas Administraciones han demorado sus informes meses.

-No llegamos antes al punto en el que estamos porque ha habido informes que debían llegar en tres y tardaron 19. Una locura. De los cuatro años invertidos en este plan, más del 60 % fue tramitación. Es algo que no tiene ningún sentido.