«Galicia me dio estos días paz, tranquilidad, un sentimiento...»

Patricia Blanco
patricia blanco CARBALLO / LA VOZ

CARBALLO

Ana Garcia

Asegura estar «encantado» con el descanso que se ha tomado en Camariñas

16 dic 2014 . Actualizado a las 05:00 h.

¿Cuántos artistas se habrán inspirado en la Costa da Morte? ¿Cuántos lo son por haber vivido aquí? Durante estos días pudo disfrutar de ella el virtuoso pianista Biel Durán (Valldemossa, Mallorca, 1964). Basta una ojeada a las críticas de sus conciertos para que los textos vayan arrojando palabras: eclecticismo, libertad. Un currículo labrado desde joven. Es suficiente una mirada a alguno de sus vídeos para que se le muevan a uno los pies y el sentimiento, una palabra que usa mucho en sus respuestas. Durán disfrutó el sábado del faro de Camariñas y de la inauguración de la exposición Mar e madeira no Vilán. Ayer, aunque conducía, no dudó en parar el vehículo para charlar un rato.

-¿Por qué su paso por aquí?

-Estamos en plena gira, enganchando concierto tras concierto, llevamos prácticamente cuatro años y pico sin parar, así que me decidí por un pequeño descanso, estos días. Tienes que estar al 100 % para los conciertos, son unas diez horas al día al piano para cada uno, es duro, pero una suerte dedicarse a lo que te apasiona. Estamos en Cotariño, en Camariñas [un hotel rústico, él ya lo conocía], un sitio precioso. Galicia me dio estos días paz, tranquilidad, un sentimiento... Además, nos dieron la oportunidad de subir arriba, al faro. Imagínate lo que es eso, el sentimiento que te puedes llevar, viendo un mar con tantos naufragios y tanta historia. Aunque el mar también te quita la vida: esto es así, el mar te da y te quita.

-Pocos días, pero se lleva una buena impresión, entonces.

-Encantado. Venía a asentar un poco la cabecita, por así decirlo. No a desconectar, porque lo que hice fue tomar esta energía maravillosa gallega. Enhorabuena por estar en un sitio tan encantador. No conocía esto y estoy tratando de ver, a través de unos amigos, la manera de organizar aquí en Galicia una serie de conciertos, abrir mercados.

-¿Dónde será el próximo?

-En la iglesia de Pollença, en Mallorca, el 28. Es un centro cultural importante en las islas Baleares.

-Decía que esto es duro, pero también una suerte poder dedicarse a aquello que le apasiona.

-Sí, realmente lo que estoy haciendo ahora es como si fuesen dos tipos de gira distintos. Por un lado, una de música clásica fusionada con jazz y, por otro, una que es una especie de homenaje a Paco de Lucía, flamenco, en este caso con un grupo y una familia muy conocida, Habichuela. La viuda de Paco de Lucía, Gabriela, está en contacto conmigo. La verdad es que poder vivir de lo que a uno le gusta está muy bien, y más cuando estás jugando con músicos de primera división, como es en este caso. Te lo ponen tan fácil... En cuanto a los conciertos en las iglesias, también es música clásica, pero acabando con un concierto de órgano. Meter flamenco me parece más irreverente en ese caso, aunque eso ya es más bien cosa mía.

-¿Cuál es su agenda ahora?

-Hasta marzo tenemos todo cubierto, y después desde abril ya no organizamos gira de verano, porque hay tanta gente y extranjeros en Baleares que tenemos llamadas para conciertos noche tras noche... Es algo imprevisible y por eso manejamos una agenda abierta durante esa época.

-¿Su homenaje a Paco de Lucía también lo rinde en el extranjero?

-Estamos centrados en la parte de España, aunque Paco ha sido mundialmente conocido y en Japón, por ejemplo, muy querido. No sabíamos cómo iba a funcionar, pero en el Castillo del Bellver, con unas 700 personas de aforo, 300 se quedaron fuera. Ahora queremos darle una vuelta a esto, porque mi intención es recordar al maestro, pero de una forma mesurada, sin cargarse la esencia.

biel durán pianista