Usuarios y trabajadores de Correos defienden la pervivencia del servicio con carácter público

cee / la voz

CARBALLO

28 nov 2014 . Actualizado a las 05:00 h.

Usuarios de Cee, Zas o A Ponte do Porto a título particular, empleados de Correos de la comarca y la propia compañía salieron ayer al paso de las afirmaciones realizadas en los últimos días por varios alcaldes de la zona en la que se referían a la firma como una empresa privada, lo que dificultaba las gestiones para solucionar la merma de servicios que se está dando o que corre el riesgo de darse en distintos puntos de la comarca.

De hecho, todos niegan que las supuestas intenciones de privatización por parte del Gobierno, dentro de la línea que están siguiendo otros muchos países europeos, se estén materializando. A día de hoy, tal como destaca Correos, el grupo está formado por cuatro empresas diferentes: la matriz, Correos Express, Nexea y Correos Telecom, con un plan de acción que, «además de atender a los principios básicos de rentabilidad, eficiencia y sostenibilidad del servicio postal, establece las acciones a desarrollar para alcanzar el propósito estratégico de ser el mejor proveedor de servicios de comunicación físicos, electrónicos y de paquetería del mercado español».

Todas ellas dependen de la Sociedad Española de Participaciones Industriales (SEPI), con capital totalmente público, y cuyo presidente, Ramón Aguirre, resaltaba hace solo unos meses que «no hay ningún plan para privatizar Correos». Unas afirmaciones de las que algunos analistas desconfían porque sí ven un horizonte de privatización más allá de las elecciones del 2016.

En cualquier caso, los usuarios y trabajadores de la comarca consultados, inciden en que actualmente se trata de un servicio público y, como tal, los diferentes responsables políticos están obligados a defenderlo, como también lo estarían aún en el caso de lo que prestase una empresa privada.

Además, ayer una portavoz de la compañía señaló que se están realizando gestiones para solventar los problemas puntuales que se han presentado en lugares que afectan en la Costa da Morte, pero negó tajantemente que nos encontremos ante una situación de desmantelamiento del servicio en el zona.