Los actos empezaron con el pregón de Julia Haz, quien reivindicó un reconocimiento para las mujeres casadas con marineros
10 ago 2014 . Actualizado a las 07:00 h.Los vecinos de Muxía se echaron ayer a las calles de la localidad para participar de la animada jornada inaugural de su Mercado das Rutas do Mar.
Los más de cien puestos instalados entre las plazas do Cabo da Vila y de la Constitución no tardaron en atraer visitantes y los espectáculos callejeros pusieron la nota de color y de diversión a esta feria que cumple ya ocho años y en las que los muxiáns se erigen en protagonistas. Así lo hizo la pregonera de esta edición, la mariscadora Julia Haz, que pese a vivir junto a la desembocadura del río Anllóns desde hace ya más de tres decenios, hizo gala de su condición de muxiá y aprovechó su intervención para reivindicar un reconocimiento para las mujeres casadas con los hombres del mar. «Elas preparaban todas as cousas e facían todo o traballo que non se vía», señaló Haz tras recordar -desde uno de los balcones de la plaza del Cabo da Vila, en el que estuvo acompañado por el alcalde, Félix Porto- algunos episodios de su infancia y juventud en la localidad.
Las compañías de teatro y los grupos de música tradicional tomaron después su relevo tratando de competir con los puestos por la atención de los presentes, muchos de los cuales no perdieron la ocasión de contemplar el enorme pez espada que será repartido en la degustación popular con la que el Mercado cerrará sus puertas esta noche (22.30).