Las bicicletas convirtieron Ponteceso en una gran fiesta sobre ruedas

Á. Palmou CARBALLO / LA VOZ

CARBALLO

Ana Garcia

Cerca de 250 personas participaron en la 22.ª edición de esta cita

28 jul 2014 . Actualizado a las 07:00 h.

Veintidós años después de su primera edición, Ponteceso se entregó ayer a disfrutar del Día da Bicicleta con las mismas ganas que la primera vez y con un enorme pelotón integrado por personas de todas las edades. No fueron las 600 personas del año 1993, cuando este tipo de convocatorias eran una gran novedad, pero los alrededor de 250 ciclistas reunidos ayer -entre los que había también vecinos de ayuntamientos cercanos- demostraron la buena salud de esta cita pensada para promover el deporte y la convivencia de una forma lúdica.

La plaza del Recheo sirvió de punto de inicio y de llegada para los participantes que, sobre las once y cuarto de la mañana -solo con un pequeño retraso sobre el horario previsto- enfilaron la carretera de A Campara para poder superar, todavía frescos, el tramo más empinado del novedoso itinerario diseñado por los responsables municipales.

Quince kilómetros, un descanso en el área recreativa de A Campara para refrescarse y reponer fuerzas, tres breves altos para reagruparse y, dos horas después, el pelotón hacía su aparición en la capital pontecesana por la carretera de Buño para cerrar un recorrido circular que fue completado sin incidencias gracias al trabajo de Protección Civil, la Policía Local y el personal municipal desplegado para esta cita. «Sobre vinte persoas máis ou menos», echaba cuentas ya al final de la jornada Remedios Varela Castro, técnica de Deportes y cabeza visible de una organización en la que también participan La Voz de Galicia y Radio Voz Bergantiños, así como diversos patrocinadores.

Familias enteras, grupos de jóvenes, miembros de diversos clubes ciclistas de la comarca, veteranos ya jubilados con ganas de demostrar que la bicicleta no entiende de edades, y niños de corta edad -el más pequeño, cumplirá aún dos años dentro de un par de semanas- plácidamente instalados en los asientos portabebés de las bicicletas de padres y madres integraron el variopinto pelotón. Javier Couto, técnico de Cultura, voluntario de Protección Civil y locutor del sorteo de regalos con los que se cerró el acto, puso la nota de color a la jornada participando con una bicicleta profusamente decorada con flores: «A ver se o ano que vén nos animamos todos e facemos un pelotón chulo», proclamó ya desde el palco de la plaza do Recheo desde el que se realizó la entrega de premios una vez que los participantes se hubieron refrescado.

Superadas ya las dos de la tarde, el pelotón se disgregó, aunque la mayoría de los ciclistas cogieron de nuevo sus bicicletas para regresar pedaleando a sus casas -incluso, aquellos llegados desde otros municipios- pero pensando ya en próximas citas sobre dos ruedas, como las que se celebrarán ya iniciado agosto en Corme y A Laracha.