El Mercado Medieval corcubionés echa el cierre con éxito de público

Antonio Longueira Vidal
Toni Longueira CARBALLO / LA VOZ

CARBALLO

La lluvia dio ayer una tregua y las calles se llenaron de visitantes

21 jul 2014 . Actualizado a las 07:02 h.

El Mercado Medieval de Corcubión echó ayer el cierre. Y lo hizo a lo grande, con el arriado del pendón mayor. Como viene siendo habitual edición tras edición, con las calles llenas de turistas, vecinos y curiosos ansiosos de disfrutar de una de las fiestas más importantes que se celebran en la Costa da Morte durante el verano. La jornada de clausura tuvo como protagonista al sol. Y es que después de día y medio pasado por agua, el calor y el buen tiempo regresaron a Corcubión Los asiduos al Mercado Medieval dejaron los chubasqueros y los paraguas en casas y coches y optaron por los disfraces.

Dar un paseo ayer por las calles de la villa era como hacerlo en Invernalia o Desembarco del Rey, los famosos reinos de la serie Juegos de tronos. La animación fue una constante desde las once de la mañana, cuando comenzaron los actos del día. Entre las actividades programadas para ayer, las exhibiciones de cetrería fueron de las más vistosas y multitudinarias. Los títeres, las danzas orientales y los conciertos en plena calle, en los que triunfaron grupos como Wyrdamur, Alfolk o Cornalusa, también dieron colorido a la zona antigua de Corcubión. Si algo hay que destacar de esta edición del Mercado Medieval ha sido la gran cantidad de iniciativas que se llevaron a cabo durante todo el fin de semana.

Esta iniciativa arrancó el viernes con escaso movimiento por culpa de las intensas lluvias registradas, que amenazaron con echar por tierra el trabajo diseñado desde hace semanas. El agua también afectó al arranque de la jornada el sábado, aunque con el paso de las horas el sol se fue imponiendo y con él, la llegada de los turistas y los visitantes.

Pero la del domingo fue, sin duda, la de más afluencia de público. Por momentos era imposible transitar por las estrechas callejuelas de la villa.