La lluvia echa por tierra el arranque de la cita del año para Corcubión

Juan Ventura Lado Alvela
j. v. lado CEE / LA VOZ

CARBALLO

El titular de un puesto de comida libera el agua acumulada en el techo de lona.
El titular de un puesto de comida libera el agua acumulada en el techo de lona. marcos rodríguez< / span>

El agua empezó a caer en el peor momento y arruinó el inicio de la fiesta

19 jul 2014 . Actualizado a las 07:00 h.

No pudo llegar en peor momento. Justo al filo de las cinco de la tarde, cuando iba a empezar a desatarse el jolgorio en todo el casco histórico de Corcubión, empezó a llover, de forma intensa por momentos y persistente hasta llegada la noche. Ante eso el gran teatro que supone el Mercado Medieval, con el inmejorable telón de fondo que es el propio Corcubión, viró en tintes de tragedia. Incluso las banderolas que anunciaban la fiesta en las entradas del pueblo sobre la carretera de Fisterra, empezaron a retorcerse y se pegaron a las farolas, como mal preludio de una tarde aciaga.

Ya en el corazón del pueblo, el panorama no era mucho mejor. Pequeños grupos buscaban refugio bajo las lonas de los feriantes, mientras estos se afanaban en levantar periódicamente los toldos para hacer resbalar el agua y evitar que se colase dentro.

Aunque los puestos comerciales están razonablemente bien protegidos y se podían admirar en parte las exposiciones, la gran víctima fueron los espectáculos, por el el Mercado Medieval de Corcubión, emblema de la comarca y la fiesta más concurrida de la localidad, está pensado para hacerse en la calle. Para que los artistas se entremezclen con el público y dejen fluir su talento, mientras la gente se toma una cerveza o come algo sobre la marcha. Evidentemente la lluvia golpea de lleno en el corazón de este tipo de ambiente y la sensación ayer por la tarde no podía ser peor, de no ser por las esperanzas que aún se albergaban para que la noche levantase un poco lo que empezó mal por el día.

Pese a las adversidades y al inmenso trabajo de los organizadores que podría venirse al traste, aún queda mucho Mercado, un más que intenso programa con actuaciones cada 15 minutos y decenas de puestos repartidos por la localidad, con todo tipo de productos desde un plato de comida caliente a la artesanía más auténtica. Así que, a poco ayude el tiempo, la fiesta seguirá.

mercado medieval