Dos muertos en una semana en playas de la comarca sin socorristas

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CARBALLO

Imagen de un operativo de emergencia que se llevó a cabo en Razo el 2 de septiembre del 2013.
Imagen de un operativo de emergencia que se llevó a cabo en Razo el 2 de septiembre del 2013. casal< / span>

La mayor parte de los arenales peligrosos carecen de este servicio

18 jul 2014 . Actualizado a las 07:00 h.

La muerte este miércoles del vimiancés de 60 años José Suárez Caamaño en la playa muxiana de Leis, o la de Segundo Cambeiro, un ceense de 59 años en Langosteira (Fisterra) por un infarto la semana pasada reabre el debate sobre la necesidad, o no, de implantar el servicio de socorrismo en playas de la Costa da Morte que carecen de este servicio.

En los últimos años, el goteo de muertos ha sido una constante, al igual que el número de personas rescatadas. Casi todos los arenales de la comarca han sufrido un episodio de estas características, pero no es menos cierto que gran parte de los accidentes registrados en las zonas de baño carecían de socorristas. Las playas de Muxía no disponen de estos profesionales y los de otros concellos comenzaron a trabajar bien entrado el verano.

También se da la paradoja de que hay playas que son relativamente seguras, que disponen de personal de emergencias suficiente y otras que no tienen un solo socorrista pese a que congregan numerosos bañistas y surfistas.

En Laxe, por ejemplo, la playa del casco urbano dispone de seis socorristas, y la piscina municipal, de dos. Sin embargo, Soesto o Traba, lugares de peregrinación de los amantes de los deportes náuticos y que acogen varias pruebas del calendario autonómico y nacional, en especial de surf, no cuentan con este servicio y tampoco paneles indicativos advirtiendo de su peligrosidad. La corporación reclamó en varias ocasiones sin éxito al equipo de gobierno local que implementase algún tipo de medida de control en Soesto y Traba,

La muerte del bañista neozelandés Peter James Stenhouse, de 30 años, en agosto del 2011, quien falleció mientras se daba un chapuzón en el peligroso arenal de Traba, sigue coleando en la localidad. A día de hoy sigue sin haber socorristas, mientras que en los últimos años ha repuntado, y mucho la presencia de surfistas y autocaravanistas en la zona

También son peligrosas las playas de Fisterra, Muxía, o Camariñas. El goteo de sucesos ha sido una constante en los últimos veranos. La mayor parte de los incidentes tuvieron como protagonistas, sobre todo del extranjero, que cubrían el Camino de Fisterra y aprovechaban la ocasión para se darse un chapuzón en Mar de Fóra, O Rostro o Langosteira.

La muerte del ciudadano norteamericano en julio del 2005 o el rescate in extremis de una peregrina alemana en agosto del 2012 por parte de un surfista, son algunos ejemplos que reabren el debate sobre la necesidad de habilitar o ampliar el servicio de vigilancia en playas peligrosas.

Bergantiños

La tragedia también se ha cebado en los arenales de Bergantiños. La muerte, en abril del 2007 de Gerardo Añón, quien intentaba rescatar a su hija pequeña en Baldaio, representa solo la punta de iceberg de los casos trágicos acaecidos en esta comarca.

Los concellos culpan de la escasez de medios a los recortes. Sin embargo, son cada vez más los usuarios que reclaman más socorristas. Los últimos en pronunciarse fueron los testigos de la muerte de Segundo Cambeiro. Se quejaron de que no había nadie en Langosteira que pudiese prestarle los primeros auxilios a pesar de que es uno de los más concurridos.

También aseguraron que la asistencia médica y la ambulancia tardaron unos 22 minutos en llegar a la playa desde el aviso de alerta.