11 jul 2014 . Actualizado a las 07:00 h.
Después de meses esperando y de que el agua provocase incluso desprendimientos en el salón de plenos, los operarios por fin han podido subir a la cubierta de la Casa do Concello. Gracias a una subvención de la Deputación, el gobierno ha emprendido las reparaciones necesarias que tienen un coste próximo a los 15.000 euros y que, fundamentalmente, buscan frenar las filtraciones de agua y las humedades que causaban serios desperfectos en las dependencias interiores del edificio.