El Concello de A Laracha ha abierto sendos expedientes contra los propietarios de dos parcelas, situadas en el lugar de A Pedra de Golmar, por no limpiarlas tal y como recoge la normativa en materia de prevención y defensa contra los incendios forestales de la Xunta de Galicia.
En su momento, el Ayuntamiento remitió varios escritos a los legítimos titulares, instándoles a que llevasen a cabo las pertinentes labores de desbroce y tala de árboles. En caso de incumplimiento, como así ha sido, el Concello procedería a la ejecución forzosa y subsidiaria de estos trabajos, reservándose el derecho de aplicar multas coercitivas de entre 300 y 6.000 euros hasta que los dueños hiciesen estas labores, tal y como recoge la ordenanza municipal.
El Ayuntamiento dio de plazo 15 días naturales a los titulares para acometer estas actuaciones. Una vez transcurrido este tiempo, el Concello larachés se puso en contacto con la empresa Forpon para realizar estas tareas de limpieza de forma subsidiaria.
Tal y como publicó ayer el Boletín Oficial de la Provincia, el valor de la madera retirada en ambas parcelas asciende a 2.256,65 euros, y los gastos derivados de la corta y transporte de toda esta masa forestal alcanzaron los 1.825.16, quedando un saldo a favor de los dueños de las parcelas de 431,49 euros.
Según apuntaron ayer fuentes municipales, este dinero está a disposición de los dueños de las fincas, aunque no descartan tampoco aplicar una sanción a los propietarios por incumplir de forma reiterada los requerimientos realizados desde el Concello en los últimos meses.
Cruzada
Precisamente, el Ayuntamiento larachés inició el pasado año una cruzada contra aquellos dueños que no han limpiado sus fincas y parcelas para prevenir posibles incendios forestales. Solo en el 2013, realizó 300 notificaciones de limpieza, con amenazas de multas añadidas de entre 300 y 6.000 euros para los que no acaten la medida. Hasta la fecha el Concello se ha visto en la obligación de limpiar 15 fincas privas en todo el término municipal. Desde el Concello insistieron ayer en que las labores de control se intensificarán en los próximos meses.