Una niña camariñana reúne más de 10.000 tapones de plástico para una fundación

Carballo / La voz

CARBALLO

Xesús Búa

01 jun 2014 . Actualizado a las 07:00 h.

Tiene 9 años y es toda una activista social. Iria Hernández Luaces ha vuelto a superarse. Ha logrado llenar 55 cajas y cinco garrafas de tapones de plástico que irán destinados a la fundación Seur. En total, unas 10.000 piezas (150 kilos de material), cuyo destino final es financiar proyectos científicos para ayudar a personas con enfermedades raras.

No es la primera vez que esta joven camariñana, que estudia en el CPI O Areal, logra un hecho de estas dimensiones. Hace dos años ya logró algo similar, aunque por aquella ocasión la beneficiaria era Paula, la niña de Boiro que nació sin hueso sacro. El padre de Iria, Eduardo Hernández, dijo que su hija «cumple todo lo que se propone». Y añadió: «Es muy solidaria, siempre está atenta a todo este tipo de campañas solidarias».

Esta nueva iniciativa arrancó en septiembre con motivo del inicio de curso. Iria Hernández aprovechaba la más mínima ocasión para ir a un bar o un establecimiento de alimentación y pedir a sus dueños que le guardasen los tapones de las botellas.Primero una caja, luego otra... Así hasta que la sala del cuartel de la Guardia Civil en el que trabaja su padre se quedó pequeña.

Ahora, completada la hazaña, Iria llamó a la Fundación Seur, que enviará mañana un furgón a recoger la mercancía. La joven quiere agradecer públicamente a todas aquellas personas que la ayudaron en esta iniciativa solidaria.