El PP de Carballo denunció ayer la dejadez del gobierno local de Carballo en el tema de la ordenanza reguladora de operaciones forestales, cuya reforma se llevará el lunes al pleno. El motivo de la modificación es la adaptación a la directiva Bolkestein, que entró en vigor a finales de 2006, pero que lleva retraso en su aplicación. A grandes rasgos, la normativa simplifica los procedimientos para el ejercicio de determinadas actividades empresariales. Así, desaparecerá la obligación de las empresas de pedir autorización al Concello para la realización de talas. Además, según el concejal Juan Carlos Castro, el ejecutivo municipal también ha eliminado las tasas, algo que, al parecer no era necesario.
Lo peor para los populares es que el Concello de Carballo tiene una ordenanza de este tipo desde el 2004, pero nunca ha llegado a aplicarla. El edil Castro Pombo explicó que había solicitado información sobre el caso en la comisión informativa del miércoles y que logró datos en las oficinas municipales. Según los propios funcionarios, el Concello nunca en los diez años de vigencia de la ordenanza aplicó las tasas o cobró los avales establecidos para realizar las reparaciones necesarias en caso de daños.
Castro Pombo también mostró un listado de nueve empresas que entre el 6 de marzo del 2013 y el 31 de ese mismo de este año pidieron autorización para trabajar en el municipio y ni siquiera consiguieron respuesta, por lo que no pagaron las tasas. Juan Carlos Castro afirmó que hay dejadez de funciones, ya que el gobierno local debe asegurarse de que no se producen daños en los caminos.
El concejal del PP explicó que en los diez años de vigencia de la ordenanza no se ha abierto ningún expediente y recordó que ya en el 2004 el portavoz popular, Alberto Sueiro, ya dijo que no se cumpliría la normativa.