El arzobispo concuerda con el alcalde y el cura en la celeridad para A Barca

La Voz

CARBALLO

19 mar 2014 . Actualizado a las 07:00 h.

El arzobispo de Santiago, Julián Barrio, recibió ayer al alcalde muxián, Félix Porto, y al párroco, Manuel Liñeiro, a los que les comunicó que comparte su preocupación porque el buque insignia de la localidad, como es el santuario de Nosa Señora da Virxe da Barca, se encuentre en este impás de espera.

Les aseguró, según dice Porto, que «a prioridade é que se contraten as obras cuanto antes», y tanto el regidor como el sacerdote se mostraron «encantados coa actitude e as ganas» del máximo responsable de la Archidiócesis de Compostela.

Para el alcalde, el hecho de que Barrio visitase Muxía justo después del desastre implica que conoce la situación de primera mano y eso le permite tener una especial sensibilidad al respecto. Ahora solo esperan que el resto de estamentos de la burocracia eclesiástica -con algunos de los responsables económicos también se reunieron ayer- compartan esas intenciones del arzobispo y actúen con la máxima celeridad.

Su colaboración resulta esencial porque son los encargados de la selección de empresas para realizar las obras y a Porto le preocupa que eso pueda dilatarse en el tiempo.

Por lo que respeta a la Xunta no cree que haya ningún problema, porque fueron los técnicos de Patrimonio los que encargaron el proyecto y marcaron las directrices, y por parte del Concello tampoco, dado que se muestra convencido de que otorgarán la licencia de obra en el menor plazo administrativo que les sea posible.

Acuerdo respecto al retablo

Aunque no entraron en muchos detalles, en el resto de cuestiones relativas a la restauración del santuario, sobre todo la intervención en la zona del altar mayor, el arzobispo también compartiría las mismas ideas que el Concello y la parroquia con lo que «esta primeira toma de contacto resultou enormemente positiva», aseguró Félix Porto.