Las denuncias enrarecen aún más el conflicto del tanatorio de Camariñas

carballo / la voz

CARBALLO

09 ene 2014 . Actualizado a las 07:00 h.

Las denuncias por el tanatorio de Camariñas enrarecen aún más el conflicto y la división por un proyecto que lleva más de año y medio en el centro de la polémica política local y, en parte, también social.

Las últimas denuncias, de un ya muy largo y enrevesado historial judicial, han acentuado aún más esa sensación. Sobre todo una de ellas, la que la directiva de la cooperativa funeraria local interpuso en el cuartel de la Guardia Civil a raíz de la apertura de las instalaciones, el domingo, para dar cabida a un velatorio.

En la declaración presentada aluden además a la empresa funeraria que se encargó de prestar el servicio (por petición expresa de la familia de la difunta), por haber usado contra el criterio de la dirección de la entidad un tanatorio que carece de permiso de Sanidade. Una empresa, además, con relación contractual con la cooperativa.

No fue la única presentada. La vecina del tanatorio que reclama una parte del terreno en el que se ha levantado (lo que obligaría a una demolición parcial), pese a que el contencioso no le ha dado la razón y solo obliga al Concello a pagarle poco más de 1.600 euros (lo ha recurrido), también ha interpuesto una denuncia administrativa «contra a empresa funeraria e o responsable do tanatorio», según confirmó ayer su abogado, Sebastián Lorenzo. Ha sido dirigida ante la Consellería de Sanidade, porque el letrado considera que se ha podido producir una «infracción moi grave», susceptible de ser sancionada con cuantiosas multas.

Otra querella

Además, en los próximos días, su clienta «seguramente» presentará una querella en el juzgado de Corcubión por presunta prevaricación, según explicó el abogado.

La denuncia de esta vecina se suma a las que ya se han interpuesto, por diversas vías, en los últimos meses. La cooperativa también realizó otras contenciosas, de momento desestimadas. Pero la más reciente, de acudir al cuartel durante el velatorio, no ha gustado a algunos de sus socios (incluso el alcalde lo es, el número 14 desde su fundación en 1977, aunque declina hacer declaraciones al respecto), que ha expresado su malestar.

A uno de ellos, José María Mouzo, que lleva 28 años de socio, le parece una «aberración». Sobre todo, «por facelo ese día, non se entende». Dice que los rectores de la cooperativa llevan 15 años intentando construir un tanatorio y no han sido capaces de hacerlo. «E agora está aí, ¿que gañan con denuncialo? ¡Os veciños que o usen!», dice.

Asegura que son muchos los socios que piensan lo mismo. Otro de los fundadores, que prefiere que no aparezca su nombre, coincide: «O que está feito, está feito. Non estou de acordo nin coa denuncia nin en que queiran tiralo», indicó.