«Una experiencia que nos ha enriquecido a todos»

Cristóbal Crespo y Sandra González

CARBALLO

05 abr 2013 . Actualizado a las 07:00 h.

Estratexias cidadás para os tempos da crise arranca con un grupo de alumnos que, tras la tensión del final del curso académico y energizados ante la cercanía de las vacaciones, se incorporan voluntariamente a una nueva experiencia: un curso de verano en el que se proponen nuevas estrategias de trabajo, en las que una ciudad entera va a ser su laboratorio de pruebas.

Se planteó una aproximación a las realidades urbanas de Carballo, las tangibles y las intangibles, mediante el trazado de unos recorridos que permitirían interpretar sus espacios y dialogar con los vecinos. Analizando estas primeras acciones descubrimos que la nostalgia de los lugares desaparecidos invade el pensamiento popular. Y surgió la inquietud de nuestra capacidad para proponer nuevas identidades o generar nuevos espacios que ocupen el lugar de aquéllos ahora desaparecidos o desfigurados, pero que siguen aún presentes en la conciencia colectiva. Con este planteamiento comenzamos a trabajar organizados en grupos, a los que se asignaron rutas y zonas de intervención.

Comienzan a surgir propuestas, ideas que habían de ajustarse a dos premisas fundamentales: el bajo presupuesto y la intervención ciudadana, el activismo vecinal. Se pretende repensar el paisaje urbano, renovar la imagen del Carballo actual, pensar libremente, sin compromisos, tópicos o ataduras, ver hasta dónde somos capaces de llegar. Surgen ideas que nos hacen entrever un Carballo distinto del que ya conocemos, ideas? unas más reales y otras que rozan la utopía. Y de esta manera se van configurando propuestas como la de ?Carballosburgo?, que convierte Carballo en la primera ciudad ?barroca de medianera? de Galicia, dando una nueva visión a sus habitantes y a los que la visitan una actuación muy sencilla, consistente en pintar una serie de muros medianeros para transformar una calle cualquiera en una perspectiva barroca. También se ideó una gran ?montaña rusa? peatonal que iría hilvanado distintas zonas y permitiendo visiones renovadas de la ciudad. A la vez, todo Carballo se cuaja de vegetación y grandes arboledas recorren sus calles. Se recuperan personajes de la historia de Carballo en una ?estatuaria popular? para caracterizar nuevos espacios públicos, de forma que conviva la gente del hoy con sus antiguos vecinos ya idos. Se resucitan lugares que ya no existen, recreándolos sobre las medianeras, y hasta se llega a plantear un metro para Carballo. De esta manera nos damos cuenta que existe un Carballo futuro, un Carballo esperanzador en el que se pueden recrear mil ideas.

Con esta experiencia hemos aprendido, nos hemos divertido, hemos disfrutado, nos hemos enriquecido y también esperamos haber podido aportar algo a esta ciudad que se ha ofrecido para este experimento y que tan bien nos ha acogido. Toda esta experiencia no sería posible si no hubiésemos contado con la ayuda de la UDC y conservas Calvo, y el apoyo e ilusión del Concello de Carballo.