El mal tiempo y el escaso tirón del percebe chafan la campaña

Antonio Longueira Vidal
Toni Longueira CARBALLO / LA VOZ

CARBALLO

BASILIO BELLO

Las mejores piñas de O Roncudo apenas pasan de 100 euros en el Muro

27 dic 2012 . Actualizado a las 07:00 h.

La campaña navideña no está resultando como esperaban los percebeiros de Corme. El mal tiempo dificulta, y mucho, el trabajo del medio centenar de mariscadores que acuden a faenar estos días a O Roncudo, la joya de la explotación. De hecho, ayer fueron incapaces de cubrir el tope de cinco kilos al día.

La patrona mayor, María del Carmen Suárez, aseguró que es «imposible» trabajar con normalidad, y explicó que, en su caso, ayer apenas extrajo kilo y medio de percebes de la zona del cabo. «E polo que escoitei -matizó-, á maioría dos que foron pasoulles o mesmo». Pero las adversidades no cesan, ya que para hoy está previsto otro temporal. «Parece que non saímos dun e metémonos noutro», lamentó la responsable del pósito cormelán. La escasez de percebe normalmente provoca una subida de los precios, pero esta Navidad el mercado tampoco está tirando. La demanda es muy baja y las cotizaciones en las lonjas son menores que en años precedentes. «As mellores piñas páganse no Muro coruñés entre 100 e 115 euros o quilo, pero o valor normal é máis baixo do habitual nestas datas», apuntó María del Carmen Suárez, quien calificó la campaña como «desastrosa».

O Roncudo permanecerá abierto toda esta semana. Sin embargo, el tiempo no acompaña. Junto a las mareas muertas de estos días hay olas de 4 y 5 metros, y, por si fuera poco, la bajamar de ayer fue a las ocho y media de la mañana, cuando aún estaba amaneciendo. Estas circunstancias impidieron a los percebeiros cubrir el cupo máximo. La semana semana pasada se cerró con 500 kilos de percebe subastado, en su mayoría en el Muro, lo que supone una media de tres kilos de percebe por día y productor.

El resto del marisco también sufre los efectos perniciosos del mal tiempo y de la crisis económica. El precio de la almeja en la Costa da Morte, por término medio, es un 30 % inferior al registrado el pasado año por estas mismas fechas. En la rula de Camariñas, la japónica cotizó ayer a 6,70 euros; la fina, a 20,30, y la babosa, a 10,50 euros el kilo.

Berberecho

La única especie que parece mantener el tipo es el berberecho. El problema es que no hay producto para subastar. «O desove veu tarde, en setembro máis ou menos, hai moita cría, pero case non hai produto de talla comercial», apuntó la presidenta de la agrupación de mariscadores de Camariñas, Dolores Bermúdez, quien comentó que en el último mes solo fueron a trabajar cuatro o cinco días, con unos precios más que aceptables: «Entre 7 e 10 euros o quilo, en función da calidade».

De la misma opinión son Julia Haz, de Río Anllóns, y María José Felípez, de Santa Helena de Baldaio. «Non hai marisco. Haberá que esperar a marzo do ano que vén a ver se medrou o berberecho ou, polo contrario, morreu», explicaron.