La aprobación del plan de ajuste de Ponteceso termina con bronca

Antonio Longueira Vidal
toni Longueira CARBALLO / LA VOZ

CARBALLO

Ejecutivo y oposición se cruzaron duras acusaciones en un tenso pleno

15 may 2012 . Actualizado a las 07:05 h.

La crispación política sigue instalada en la corporación de Ponteceso. La aprobación de la operación de crédito del plan de ajuste derivó ayer en un tenso pleno, con cruce de duras acusaciones entre el alcalde y los portavoces de la oposición. Al final, la propuesta salió adelante con los apoyos del PP, la abstención del PSOE y los votos contrarios del BNG y APIN.

Finalmente, el Ministerio de Hacienda abonará a las empresas acreedoras 1.680.624 euros, frente a los 1.822.000 inicialmente previstos. La diferencia estriba en los distintos criterios a la hora de contabilizar las facturas que tiene Fenosa y el Concello. La deuda con la eléctrica no se incluye en el crédito ICO, pero se mantiene a la espera de que sea abonada.

El regidor volvió a defender este plan de recortes argumentado que las empresas podrán cobrar lo que se les adeuda. José Luis Fondo negó además que las arcas municipales sufran tensiones de tesorería y aseveró que o «Concello pódese endebedar máis, segundo as ratios facilitados polo Ministerio de Economía para concellos de similares niveis de poboación aos de Ponteceso».

La oposición, por su parte, acusó al PP de llevar al Ayuntamiento a una situación «de quiebra técnica». El portavoz socialista, Lois García Carballido, apuntó que al plan de ajuste se presentaron 800 facturas, y le preguntó al alcalde si había más facturas sin contabilizar, algo que el mandatario negó.

Por su parte, el edil del BNG le pidió a Fondo que diga «dunha vez cal é a débeda real do Concello». Manuel Varela comentó en su intervención que no es lógico trasladar a los vecinos «a mala xestión do goberno», y acusó al PP de hacer de Ponteceso el municipio más caro de la comarca de Bergantiños «no que a incremento de taxas e impostos se refire».

También estuvo muy crítico el portavoz de APIN, José Manuel Pose, quien, al igual que ocurrió en el pleno en el que se debatió el plan de ajuste, volvió a insistir en que entre la relación de facturas presentadas ante Hacienda hay documentos de pago fechados en febrero de 1999.

Trabas

El BNG, PSOE y APIN denunciaron las trabas que, a su entender, pone el alcalde en el desarrollo del trabajo de control a la gestión del ejecutivo. En este sentido, Carballido acusó a Fondo de dejarle solo dos días para ver la relación de facturas antes de la celebración del pleno «o cal demostra a forma de actuar do equipo de goberno». El regidor le contestó diciendo que los ediles tuvieron tiempo suficiente para comprobar la documentación: «Hai concellos, algún deles socialista, que levaron a pleno a operación de crédito do plan de axuste con menos tempo do que tivo vostede [en alusión a Carballido] para ver as facturas», le contestó Fondo.

La tensión en el pleno, que duró una hora y media, fue en aumento y terminó con cruce de acusaciones y con la retirada de la palabra por parte del alcalde al portavoz socialista en varias ocasiones, y al que volvió a llamar «maleducado» antes de dar por finalizado el pleno.