Las actuaciones para acabar con los malos olores de la EDAR de Ribeira se extenderán a toda la red

La casa consistorial ribeirense dio cabida ayer a una nueva reunión para abordar el problema que ha surgido por los malos olores procedentes del nuevo saneamiento. En el encuentro, en el que participaron Xunta, Concello, Acuaes y la empresa redactora del proyecto, se explicó que ya se están ejecutando una serie de mejoras en la EDAR para reforzar el sistema de desodorización. Sin embargo, se acordó extender las actuaciones a toda la red para poner fin a los problemas causados por los hedores.

El objetivo es seguir optimizando el funcionamiento integral de las instalaciones en su conjunto. Por un lado, el gobierno local prevé instalar tomamuestras en los tanques de tormenta de Pedra Pateira y Areeiros para realizar un análisis comparativo de la evolución del agua residual entre los dos puntos para, con los datos en la mano, decidir la conveniencia de desodorizar alguna arqueta o añadir en origen algún tipo de elemento aditivo que evite la formación de ácido sulfhídrico.

Asimismo también se examinarán las canalizaciones por si se hubiese realizado algún vertido inapropiado, y se conectará la canalización portuaria al colector industrial, de modo que no finalice en la depuradora.

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