A mellor tripulasión

RIBEIRA

26 jul 2016 . Actualizado a las 05:00 h.

La semana que acaba ha sido especialmente movida en Ribeira. Ayer, por ejemplo, solo había que recorrer las calles o la playa de Coroso para darse cuenta de que el día del Apóstol se parecía más a un miércoles de ceniza pero con bañadores y gafas de sol y sin luto ni llantos. «El cuerpo las hace, el cuerpo las paga», se dice en estos casos, pero ojo, que a este dicho se le puede replicar con aquel otro que reza «sarna con gusto no pica». Y es que esta singladura, que vino acompañada del tiempo más apropiado para hacerla en calmada, estuvo marcada por una celebración con más días que ninguna pero sin apenas incidentes. Algo que, atendiendo a años pretéritos, es digno de mención. Pero lo mejor, como suele ocurrir, estaba por llegar. Fue la denominada Ópera Dorneira, un espectáculo atemporal que implicó a generaciones y personajes dispares que tienen en común, principalmente, la Festa da Dorna y la música de Ribeira. Y digo música en general y no bravú por lo acertado de una propuesta en la que no faltó nada ni nadie y que sorprendió por su agilidad para lograr que el personal no perdiese la perspectiva durante más tres horas. En todo caso, hoy, y ya dejando atrás esos días de trámite que son los miércoles de ceniza, hay que poner en solfa a toda esa gente que hace de la Festa da Dorna algo especial y con calado, historia, creatividad, buen ambiente y ganas de pasarlo más que bien respetando al prójimo. Así, por la parte que me toca, felicitar a todas esas miles de personas que forman parte de a mellor tripulasión.