Proyectos como las circunvalaciones de Rianxo, O Son o Ribeira se gestaron hace una década
23 abr 2017 . Actualizado a las 08:46 h.Los proyectos de humanización de los cascos urbanos que, de forma creciente, se están desarrollando en los ayuntamientos de la comarca pasan inexorablemente por la construcción de accesos alternativos que reduzcan el tráfico rodado en el centro de las localidades, permitiendo de esta forma la mejora de la seguridad vial y el predominio de los peatones frente a los vehículos. Sobre la necesidad de dotar de carreteras de circunvalación a Porto do Son, Rianxo y Ribeira lleva hablándose desde hace una década, al igual que de la conveniencia de adecuar la vía que une Boiro y Noia o de favorecer la comunicación de Lousame con el sur de Galicia, mediante la ampliación y eliminación de curvas en el trazado que discurre por O Confurco. Varias de estas actuaciones llegaron a presupuestarse y sobre otras existen estimaciones de coste, pero estas inversiones, que superan los 30 millones, llevan años estancadas y sin que observen indicios de que vayan a concretarse, pese a las reiteradas demandas de los regidores.
Un ejemplo claro es la variante de Portosín, cuya realización ha sido aplazada sin fecha por parte de la Xunta. El alcalde, Luis Oujo, afirma que no renuncia a la obra, pero tras su reunión de esta semana con la conselleira de Infraestruturas, Ethel Vázquez, reconoce que la carretera, con un coste que ronda los 24 millones, no se hará por ahora.
Otro proyecto que no avanza, pero cuya necesidad no cesa de reiterarse afecta a los congestionados accesos a Ribeira. El mandatario, Manuel Ruiz, no habla de construir una circunvalación, sino una radial: «Para que os automobilistas, en lugar de saír da cidade por Padín poidan facelo por Abesadas ou pola rúa Fernández Bermúdez».
Plan Move
La actuación, indica Ruiz, fue incluida en el Plan Move de la Xunta, pero los plazos de realización se han ido modificando. Con el último cambio, el horizonte de su ejecución se sitúa en el 2020.
Con un proyecto de reforma integral de la avenida Malecón para reducir el volumen de vehículos y un plan de peatonalización en marcha, Manuel Ruiz es consciente de que Ribeira necesita alternativas e intenta que haya avances. Recientemente mantuvo un encuentro con el director de la Axencia Galega de Infraestructuras, Francisco Menéndez, de quien arrancó el compromiso para realizar un estudio de viabilidad que determine cuál sería el mejor trazado.
Ruiz Rivas, reconoce que las limitaciones económicas, ya que en su día se estimó que la obra superaba los diez millones, son la causa del retraso.
Mucho más barata es la actuación sobre la que insiste el rianxeiro Adolfo Muíños, en este caso a la Diputación. Se trata de la construcción de un vial que discurriría entre A Pedreira y Rianxiño: «Daría acceso directo á zona de praias, reduciría o tráfico pesado no casco urbano e sería unha importante mellora en materia de seguridade para os peóns. Ademais, parroquias como a de Leiro estarían comunicadas sen pasar polo centro».
El coste asciende a medio millón de euros y en el 2011 hasta llegó a presupuestarse. Incluso, explica Muíños, se determinó qué terrenos habría que ocupar: «Eu veño demandando aos sucesivos gobernos provinciais que se leve a cabo o previsto e senón se fai deberían liberarse as fincas que están afectadas».
Por el momento, lo que sí se acometerá es una histórica reclamación que beneficia a Noia y Lousame: el enlace desde a Fialla a Portobravo.
Lousame persigue la mejora de la conexión con Pontevedra y Boiro, descongestionar el casco urbano
Las últimas actuaciones viarias y otras que están a punto de iniciarse mejorarán las conexiones de Lousame con la capital gallega y la zona norte de la provincia. Por eso, las reclamaciones del Concello se dirigen a conseguir lo mismo con la parte sur. Para acortar distancias con Pontevedra es necesaria una reforma de la carretera que va por O Confurco. Teresa Villaverde afirma que se trata de una demanda histórica por la que ella no deja de pelear. Cree que cuando se termine el enlace de Portobravo, la necesidad de completar la actuación se hará más patente.
Por su parte, Juan José Dieste trabaja en el desarrollo de una propuesta que tampoco es nueva: una vía que discurra paralela a la avenida de A Constitución y que permita llegar a Cabo de Cruz y a Abanqueiro sin pasar por el centro: «Eso eliminaría mucho tráfico en el centro y permitiría acometer otras actuaciones». El regidor calcula que la obra costaría medio millón y estudia acometerla con fondos propios.