Rianxo en Común y PP piden pleno tras pleno un local donde poder trabajar
28 nov 2015 . Actualizado a las 05:00 h.Un local municipal para que la oposición pueda trabajar. Con esta petición inicia pleno tras pleno el apartado de ruegos y preguntas Antón Castro, edil de Rianxo en Común. La sesión que se celebró el pasado jueves no fue una excepción, y en esta ocasión la solicitud la hizo ya con un tono de cansancio por tener que repetir siempre lo mismo. «Non o vamos a facer esta vez, pero se no seguinte pleno seguimos sen un espazo físico onde poder traballar teremos que comezar a preguntar para que se están a usar os locais municipais».
Al igual que en la lista de Antón Castro, este ruego está presente siempre en las peticiones que realizan desde el Partido Popular al equipo de gobierno. El portavoz de los populares, Norberto Uzal, también incide en este punto afirmando que «non é un capricho, é un dereito que está recoñecido na lei».
En la legislación ?indica Uzal? se recoge que los partidos de la oposición tienen derecho a disponer de un local en la propia casa consistorial, pero el edil del Partido Popular aclara que «xa non pedimos que sexa no propio concello porque entendemos que hai limitacións de espazo, nin tampouco pretendemos que sexa un local para cada partido. O que queremos é un lugar onde podamos traballar, recibir aos veciños cando nos queren comunicar algo ou estudar os expedientes que solicitamos con espazo suficiente para facelo».
Desde el ejecutivo aseguran pleno tras pleno que están estudiando el tema para cumplir con la petición y se defienden alegando que ceden locales municipales para muchos actos, pero lo cierto es que a día de hoy estos grupos de la oposición no han visto satisfecha su demanda, por lo que piensan que el gobierno les está «dando largas».
Este no es el único ruego que se repite. El otro es el que realizan los dos citados grupos políticos para que la documentación con las propuestas que se debatirán durante el pleno les sea entregada con, por lo menos, una semana de antelación.
Conflicto con el servicio del agua
El punto más debatido tenía relación con el convenio firmado por el anterior alcalde, Pedro Piñeiro, con la empresa concesionaria del servicio de agua y saneamiento en el que se establecía un pago, superior a 100.000 euros, para reponer el equilibrio económico que tendría que asumir el Concello o los vecinos. El Ayuntamiento no pagó esta cantidad y pidió una revisión de oficio al consejo consultivo sobre esta cuestión, que resultó contraria a sus intereses. El informe caducó y en la sesión se aprobó, con la abstención de PP y Rianxo en Común, la declaración de caducidad del mismo. Todos los grupos estuvieron de acuerdo en que no se debe de pagar la compensación a la empresa, aunque no en la forma de proceder del ejecutivo, y en que este asunto acabará en los tribunales.