Las propuestas presentadas por Noia, Boiro, Muros y Carnota no superaron el corte de la comisión de valoración de la Consellería de Traballo
01 abr 2015 . Actualizado a las 05:00 h.A diferencia de lo ocurrido en la anterior convocatoria, esta vez la resolución de la Consellería de Traballo sobre los talleres de empleo ha traído buenas noticias solo a una pequeña parte de los municipios de la comarca. De los siete concellos barbanzanos que solicitaron una iniciativa de este tipo, solo tres podrán desarrollarla: Outes, Porto do Son y Ribeira, estos dos últimos con un proyecto conjunto.
Aunque la resolución aún no es definitiva, fueron las propuestas de esos tres ayuntamientos las que lograron superar el corte de la comisión de valoración del departamento autonómico. Entre los dos talleres de empleo concedidos, se crearán un total de cuarenta puestos de trabajo, una cifra ligeramente inferior a la prevista inicialmente. No en vano, Ribeira y Porto do Son solicitaban en su proyecto 30 alumnos, frente a los 21 concedidos.
Con todo, los responsables de ambos concellos mostraban su satisfacción por haber logrado un taller de empleo -el segundo juntos- en la especialidad de carpintería, que, entre otras actuaciones, permitirá acondicionar el nuevo centro social de Carreira y que empleará a una veintena de personas durante seis meses.
Por su parte, la iniciativa promovida por el Ayuntamiento outiense, Outes Rural, dará trabajo a 19 vecinos del municipio. La Xunta invertirá en ambas iniciativas algo más de 355.000 euros.
La cruz
Eso, en cuanto a la cara amable del asunto, pero hay también una cruz: la de los otros cuatro concellos que se quedaron a las puertas de obtener la puntuación necesaria para poder ofrecer a sus vecinos una salida laboral.
En la convocatoria anterior, los ayuntamientos de Arousa norte fueron de la mano en la solicitud de un obradoiro de empleo, pero esta vez cada uno fue por su lado con suerte dispar. Y es que Boiro sí presentó una propuesta en la especialidad de jardinería que no logró superar el filtro de la comisión de valoración.
Por su parte, el gobierno de Noia también envió un proyecto, en su caso, en colaboración con la fundación Blanco Monroy. Tampoco esta vez se lo concedieron. Igual que a Muros y Carnota, y participaban en la convocatoria con una iniciativa conjunta que tampoco llegará a buen puerto, para indignación de la alcaldesa muradana, Caridad González: «É o cuarto ano que pedimos o obradoiro con Carnota, cumprimos todos os parámetros, e sempre hai algún pero para no dárnolo. A única explicación é que non lles gusta o noso color».
Los ayuntamientos sin obradoiro apuestan por las contrataciones temporales
Varios concellos rechazaron solicitar el taller, en algunos casos, como Lousame y Rianxo, conscientes de que tenían pocas posibilidades de obtener la puntuación suficiente para que se lo concedieran. A esto hay que añadir que, para alcaldes como el pobrense y el rianxeiro, resulta más ventajoso desde el punto de vista de la creación de empleo optar a las contrataciones temporales a través de los distintos programas que ofertan las Administraciones autonómica y local.
El rianxeiro Adolfo Muíños considera que las convocatorias de los talleres de empleo son «moi escasas», y explica por qué: «A creación de emprego é moi cativa. Na última edición, que compartimos cos demais concellos de Arousa norte, só houbo cinco obreiros de Rianxo, e os alumnos traballaron no noso concello apenas dous meses. En cambio, coas subvencións, o plan de cooperación e as contratacións directas podemos chegar a contar con case cincuenta operarios temporais este ano». Asimismo, Muíños recordó que nunca les han concedido un obradoiro solicitándolo en solitario.
Por su parte, el alcalde de A Pobra, Isaac Maceiras, señaló que su gobierno prefiere optar al mayor número de trabajadores posible con cargo a los planes provinciales y autonómicos para tareas de mantenimiento, «que é o que precisamos agora».