Durante la sesión hubo varios momentos en los que el debate entre los grupos que conforman la corporación fue intenso
01 ago 2015 . Actualizado a las 20:40 h.El gobierno pobrense presentó en el pleno del jueves un cambio presupuestario que implicaba a las empresas de seguridad vial de A Pobra, punto que se encontró con la negativa de socialistas y nacionalistas. Esta fue la llama que incendió un salón de plenos hiperventilado. La encargada de prender la mecha fue la líder del PSOE municipal, Teresa García, que aseguró: «Isto é sablear aos veciños deste pobo. Terase que poñer en antecedentes á xente, en primeiro lugar a empresa íase levar un 30% e agora xa é un 75%».
El regidor pobrense matizó la afirmación de la socialista, ya que aseguró que solo en los casos donde están implicadas las dos empresas el montante alcanzaría el 75%. Piñeiro aseguró que no era un pago que agradase al gobierno y la portavoz de Nós Pobra, Charo Varela, incidió en que «haise que facer cargo das obrigas do noso Concello».
El BNG demandó al gobierno que mostrase el contrato del radar móvil. Petición que no pudieron cumplir, ya que se trataba de «un contrato verbal que non existe», tal y como aseguró el regidor pobrense.
Esto incendió incluso al público, entre el que se escucharon murmullos de «isto é unha auténtica estafa». El edil nacionalista, Xosé Manuel Casal, recordó a Piñeiro unas palabras citadas anteriormente, cuando el alcalde aseguró que los contratos verbales del anterior gobierno no tenían legitimación para él: «Parece que algúns contratos verbais si teñen lexitimidade para vostede, que se leven o 75% de cada multa é escandaloso. O BNG ve correcto que se rescinda o contrato con esta empresa, facer política é mostrar cales son os nosos intereses e hai que deixar claro que non van poñer ningunha multa máis». El líder popular, Manuel Durán, aseguró: «Unha empresa que fai un traballo ten que cobrar por el». Fueron los apoyos populares los que decantaron la votación del punto del lado del gobierno, ante el rechazo de BNG y PSOE.
Otros puntos
La moción presentada por el PP para que se limpiasen las zonas de ocio volvió a caldear el ambiente. Los populares aseguraron que el gobierno había descuidado varias áreas de la localidad. El debate se incendió por segundos, momento en que Piñeiro recordó a los populares el estado en que había quedado el Concello con su gobierno: «A xestión do antigo goberno foi nefasta, esta é unha factura de 120.00 euros en obras desta precampaña».