La presunta autora del robo le habría sustraído la joya a través de abrazos y gestos cariñosos
22 jul 2017 . Actualizado a las 05:00 h.Una septuagenaria ribeirense denunció ante la Policía Nacional la sustracción de una cadena de oro gruesa que llevaba puesta, cuyo valor no fue estimado, a través de un método conocido como hurto amoroso. Consiste en aproximarse a la víctima, generalmente una persona de avanzada edad, y buscar el contacto físico con ella a través de abrazos o gestos cariñosos para poder sisarle objetos de valor que lleve encima.
En este caso, la afectada, una mujer de 73 años, identificó a la autora del hurto amoroso como una mujer joven de acento extranjero. En la comisaría ribeirense indican que se trata de una artimaña extendida en todo el territorio nacional, al tiempo que aconsejan a los mayores que extremen las precauciones cuando un desconocido se les acerque con ánimo cariñoso, porque tras las caricias puede haber una intención oculta detrás.