Desiré Koaukou: «Los africanos, con el corazón, también formamos parte de Galicia»

v. couto / s. g. CARBALLO / LA VOZ

BARBANZA

J. M. CASAL

El sacerdote está al frente de la organización de la fiesta solidaria en Mazaricos

28 jun 2017 . Actualizado a las 05:00 h.

Ya está todo preparado para que este sábado se celebre la novena edición de la Festa Africana, que se llevará a cabo en Mazaricos, bajo la organización de la entidad Égueire, que lidera Desiré Koaukou Tanoh, sacerdote, entre otras parroquias, de Brens y Ameixenda.

-Nueva edición de la Festa Africana, ¿cuántas van ya?

-Pues llevamos nueve ya, gracias los gallegos y a las gallegas. Este pueblo solidario que nos ayuda y acepta la multiculturalidad que estamos enseñando. Mostramos el rostro más positivo de África, no solo la guerra, la miseria o el hambre. Sino que, a pesar de todo esto, África tiene una cara más positiva. La gente acude y ve el baile africano, la cultura africana, es como trasladar un poquito de África a Galicia. Los africanos también, con el corazón, formamos parte de Galicia. Qué bonito es lo que estamos intentando. Ya llevamos nueve años y la gente asiste, y el que viene celebraremos el décimo aniversario, y esperemos que sigan como siempre, para compartir, para ayudar, con nuestra presencia, nuestras aportaciones, a este continente tan olvidado.

-¿Cuándo comenzarán las actividades?

-Sobre las 11.00 o 12.00 horas, más o menos. Habrá una muestra de artesanía africana, tendremos un pincho, presentando a la gente los proyectos que vamos realizando. Este año hemos inaugurado la maternidad. Tendremos un dispensario al lado, lo estamos iniciando. También una piscifactoría, para los microcréditos de las mujeres. Como no tenemos medios de conservación, lo habitual es ahumar el pescado para poder venderlo en el mercado. Pero a veces van al mar y no encuentran pescado, pasan meses, y nada. Por eso decidimos hacer la piscifactoría, para esos meses de escasez. Y venderlo después, además de tenerlo fresco. Para todos estos proyectos necesitamos ayuda. Nuestro objetivo, con la fiesta, es recaudar fondos para todo ello. Es como un círculo: ya ayudamos a las mujeres y hay otro grupo que ya siembra maíz, arroz, legumbres, y ahora podrá cooperar para alimentar a los peces.

-Todo lo que se recauda va para esa ayuda, entonces.

-Sí, y la gente lo sabe. Todo va para ahí. Recaudamos, pedimos, pero también aportamos, con la comida, la cultura. No tenemos dinero, pero lo que tenemos lo aportamos, es como un intercambio, para que el mundo sea algo mejor, más solidario. Los que tienen dinero ayudan, los demás comparten. Y eso lo veo muy bonito. La gente acude, comparte, colabora, ayuda con su presencia.

-¿Qué actividades habrá?

-Un montón de cosas, todo de carácter cultural. África, en Galicia, en julio, tiene mucho para dar. Habrá, por ejemplo, un grupo senegalés actuando. No concentramos todo en Costa del Marfil: son africanos, y vienen. Ya estuvieron en Cabo Verde, vamos alternando para mostrar la diversidad de África a través de esta celebración.

-¿Y cuánto hay que pagar para poder asistir?

-Pedimos 20 euros por la comida. Y los niños de menos de diez años acuden gratis. No miramos el dinero, el objetivo es cómo se puede ayudar. La gente ha sido generosa. Hay quien no puede ir a la fiesta, pero da una aportación, que llamamos mesa 0, dan una participación para que los proyectos puedan avanzar. Invitamos a que acudan. En julio hay tantas cosas que animo a que vengan.

-¿Y para anotarse, qué hay que hacer?

-En Abanca, por ejemplo, indicando que es para la Festa Africana. Es importante hacerlo para la previsión de la comida. O directamente conmigo, en Cee, Corcubión, Buxantes, Pereiriña, Ameixenda, Brens... Si hay mucha gente estamos mirando a ver si se contrata un autobús. Depende de los que se apunten. El plazo es hasta este viernes. Cuanto antes lo hagan, mejor, para organizarlo bien. Y si no pueden ir al banco, en las parroquias, y ya nos ponemos de acuerdo.

-Por los precedentes que hay, ¿puede decirse que los vecinos son solidarios?

-¡Sí! De lo contrario no hubiésemos llegado a esta edición. Llegan de todas partes, de Pontevedra, Santiago, incluso de Madrid. Ponemos a África en el centro de la realidad. Es en beneficio de todos: si África va bien, no hará falta que la gente venga en cayuco aquí, con riesgo de morir.