Los embalses afrontan el verano con los niveles más bajos de la década

X. ramón alvite RIBEIRA / LA VOZ

BARBANZA

ALVITE

El de A Fervenza está al 76 % de su capacidad y tiene 10 hectómetros menos que hace un año

04 jun 2017 . Actualizado a las 05:00 h.

Faltan poco más de dos semanas para el comienzo del verano y la situación que presentan los embalses de la zona no invita al optimismo, al menos en lo referente al volumen de agua que tienen acumulada, con unos niveles bajo mínimos. Pese a que ninguno de los tres pantanos que se asientan en territorio barbanzano se destina al abastecimiento de los hogares, su estado sí representa un barómetro bastante aproximado sobre las repercusiones que la sequía puede tener en la zona. Y, lo cierto, es que estas pueden ser especialmente graves si se tiene en cuenta que la cantidad embalsada a día de hoy en la comarca es la más baja de la última década.

Especialmente significativo es el nivel del embalse de A Fervenza, uno de los más grandes de la comunidad. De los 103 hectómetros cúbicos de capacidad máxima que tiene, apenas alberga 79, diez menos que hace justamente un año.

El encoro de A Fervenza ocupa una extensión superior a las 1.200 hectáreas y sirve como mecanismo de regulación para toda la cuenca del Xallas y, por tanto, también para el embalse de Santa Uxía, que abarca terrenos de Mazaricos y Dumbría, y que sufre igualmente la falta de precipitaciones por las que se han caracterizado el invierno y la primavera. Este pantano posee una capacidad de 18 hectómetros cúbicos y alberga actualmente 12, cuatro menos que el año pasado y tres por debajo de la media que se ha ido registrando durante los últimos diez años.

Más grave todavía parece ser la situación en el embalse Barrié de la Maza, que, según los datos del Ministerio de Agricultura y Pesca, Alimentación y Medio Ambiente, apenas alcanza un tercio de su capacidad, estimada en 31 hectómetros cúbicos. Según la última medición de su nivel, el volumen embalsado se sitúa en 10 hectómetros, la mitad que en la misma semana del 2016 y un 35 % menos que la cantidad media que ha venido albergando durante la última década.

Sin cambios

Nada apunta a que, al menos durante las próximas jornadas, lleguen las lluvias a la comarca y pueda recuperarse mínimamente el caudal de ríos que abastecen estos embalses. De hecho, de cumplirse las previsiones de las principales agencias meteorológicas a nivel mundial, la situación durante los meses estivales puede ser verdaderamente preocupante, pues los pronósticos apuntan a temperaturas altas y pocas jornadas de lluvia.

Aunque de momento no se han registrado problemas con el abastecimiento, son muchos los vecinos de la comarca que confirman serias bajadas de nivel en los manantiales y fuentes de los que se abastecen sus viviendas. En Mazaricos, donde 80 de los 102 núcleos de población se sirven de traídas vecinales, reconocen mermas en las traídas de Maroñas y Cuíña, dos de los más grandes del término.

En este último calculan que la fuente que los abastece ha reducido a más de la mitad su producción y aunque nunca ha secado del todo durante el verano, temen que este año la situación pueda ser preocupante.