Ramiro Carregal reúne a la élite gallega

Sevilla gómez RIBEIRA / LA VOZ

BARBANZA

X. A. sOLER

Dos pruebas creadas por el empresario arousano atraerán a las mejores tripulaciones a aguas barbanzanas

19 may 2017 . Actualizado a las 05:00 h.

El hotel A Quinta da Auga, en Santiago, acogió ayer la presentación de dos pruebas que marcarán el arranque de la temporada velera en Galicia. La Regata Ramiro Carregal Rey-Gran Trofeo Faro de Corrubedo y la Regata Frinsa-Trofeo Presidente Ramiro Carregal Rey atraerán a aguas barbanzanas a las mejores tripulaciones autonómicas, cuyas embarcaciones no fallan a la llamada del empresario arousano.

La primera de ellas se celebrará entre los días 27 y 28 de este mismo mes, mientras que la segunda arrancará el 3 de junio. Fue el propio Ramiro Carregal quien echó la mirada al pasado para rememorar cómo había sido la creación de ambas pruebas. Sobre el Gran Trofeo Faro de Corrubedo, el empresario, uno de los fundadores del Club Náutico de Ribeira, apuntó que nació cuando desde Portosín les pidieron unos cuantos barcos prestados para completar una regata, que enviaron en un camión.

Ese fue el momento, cuando aún no había náutico en Portosín, en el que nació una hermandad que se mantiene muy fuerte. Sobre la regata Frinsa, el empresario y amante de la vela aseguró que se creó gracias a una casualidad. Hacía años que realizaban una prueba que pasaba por Corrubedo, pero un verano el mal tiempo les impidió mantener la ruta típica y decidieron desviarla hacia Sálvora. El recorrido gustó tanto a los participantes que, un año después, se instauró la primera Regata Sálvora. Fue en ediciones posteriores cuando pasó a denominarse Frinsa. 

El ágape

Carregal reconoció que esta regata, además de competitiva, es una prueba muy querida, ya que, tras completar el recorrido, los participantes se quedaban en la isla de Sálvora para comer unos pinchos y disfrutar de los lances de una jornada velera que siempre sacaba una sonrisa a todos.

Portosín será el punto de salida del Trofeo Faro de Corrubedo

El comodoro del Real Club Náutico de Portosín, Fernando González, tomó el testigo de Ramiro Carregal para explicar las características de la decimoctava edición de la Regata Ramiro Carregal Rey-Gran Trofeo Faro de Corrubedo. En primer lugar recordó que el punto de partida rota cada año entre Porto do Son y Ribeira, por lo que esta vez serán los sonenses los que den el pistoletazo de salida.

El sábado 27 de mayo, a partir de las 12.00 horas, comenzará la primera jornada, que será del tipo costero. Según apuntó Fernando González, en esta edición la navegación será completamente libre, por lo que cada tripulación podrá escoger el camino a seguir. El comodoro sonense explicó que, de las tres entradas que hay para la ría, los patrones suelen escoger la norte, a pesar de que se trata de la más complicada. Su estrechez motiva a los regatistas, que ponen en liza su destreza sobre el agua.

Segunda jornada

La competición seguirá el 28 con una regata barlovento-sotavento, en la que los regatistas tendrán que demostrar su destreza maniobrando, ya que hay que completar dos ceñidas y dos popas.

El mejor en ambas jornadas alzará el Gran Trofeo Faro de Corrubedo, que a día de hoy está en la sede del Náutico de Ribeira, al haberlo ganado el pasado año un barco del sur de Corrubedo. Como reto, los sonenses se marcan recuperar el título para engrosar sus vitrinas. 

La Regata Frinsa tiene el reto de superar los 40 barcos del 2016

El presidente del Náutico de Ribeira, José Luis Torres Colomer, que aceptó con caballerosidad el reto de Fernando González sobre el Gran Trofeo Faro de Corrubedo, aprovechó la ocasión para desgranar las características de la Regata Frinsa-Trofeo Presidente Ramiro Carregal Rey, que este año tiene como reto superar las 40 embarcaciones que participaron en la edición del 2016.

El dirigente reconoció que la Regata Frinsa se ha convertido en la mejor romería del mar, ya que, además de la competición, existe la particularidad de la fiesta posterior, tradición que se mantiene desde su primera edición. Una vez terminada la pelea marítima, todas las tripulaciones se unen para disfrutar de un ágape donde intercambian pareceres y comentan todo lo ocurrido en alta mar. Además de reconocer que se completa un recorrido muy interesante, se trata de una cita muy competitiva, en la que cada embarcación quiere alzarse con la victoria.

Más categorías

Además de las clase regata, crucero-regata y crucero, en esta edición se suma la clase open, con lo que se esperan superar los 40 barcos inscritos.

Según apuntó el propio Torres Colomer, esta es una de las regatas de Galicia que tienen más participación después de la Rías Baixas. Por último, recordó que invitados y familiares de los participantes contarán con un catamarán para seguir la prueba desde primera línea.