¿Un polígono en Palmeira?

José Vicente Domínguez
José Vicente Domínguez BUZÓN DEL LECTOR

BARBANZA

19 may 2017 . Actualizado a las 05:00 h.

Recuerdo a un vendedor de periódicos quien, hace años, después de ofrecer los diarios, con nulo éxito, en el Sarasquete que salía de Ribeira en dirección a Palmeira, preguntó con sorna al chófer: «Para onde vai este autobús?» Y al ser informado de su destino, comentó: «Boh, eu parezo parvo, se os de Palmeira non saben ler!». Pues así les debe de parecer a algunos cuando, de manera absolutamente fuera de toda lógica, pretenden ubicar en Palmeira un polígono industrial lindante con A Carballa, O Lixó, Cudieiros, Mourelos e Ventín. ¡Qué horror! No debe extrañar la fuerte movilización de mis vecinos que, por supuesto, son lectores capaces de ver más allá de bonitas palabras y promesas, adornadas con bocetos y dibujos de colores. Saben lo que puede ser un polígono industrial a las puertas de sus casas. Y, como conocen las aberraciones urbanísticas en la capital del concello, tiemblan al pensar lo que sus dirigentes son capaces de hacer con ellos.

Sé que no es fácil pedir sensibilidad medioambiental a quienes anteponen su economía particular a cualquier irreversible desastre ecológico, paisajístico, arqueológico y de habitabilidad. A quienes les traen al pairo los dramáticos e irreparables daños que se pueden ocasionar a núcleos de viviendas centenarias, en las que sus ocupantes quieren seguir viviendo, sin ruidos, sin malos olores, sin esperpénticas y tristes naves absolutamente impropias y ofensivas a su entorno. Vecinos que quieren seguir plantando su maíz, sus patatas, sus berzas y disfrutar de frutales y de pasto para sus animales. Vecinos que quieren vivir con mayúsculas, con la tranquilidad heredada de sus antepasados.

¿Se detiene el progreso con esta manera de pensar? La respuesta es no. El progreso se detiene cuando las decisiones se dejan en manos de personas que anteponen sus intereses económicos a la imprescindible sensibilidad medioambiental. Se detiene y se perjudica cuando existe la sospecha de la especulación con propiedades recientemente adquiridas. Los vecinos de Palmeira nos preguntamos: ¿Por qué no se inicia la primera fase del macropolígono industrial de Barbanza aprobado por la Xunta de Galicia y publicado en el DOG del 18 de mayo del 2011? ¿En qué cajón quedaron aquel millón de metros cuadrados en las inmediaciones de Moldes?

José Vicente Domínguez es vecino de Palmeira.