El conjunto carnotano, único club que queda en el concello, está peleando por ascender a Segunda Autonómica
21 abr 2017 . Actualizado a las 05:00 h.En un año todo puede cambiar. Un equipo como el Lira, que la temporada pasada pisaba los campos de los conjuntos que militan en el grupo 4 de Tercera Autonómica sin cosechar buenos resultados se encuentra en la actualidad luchando por subir de categoría. El Lira está inmerso en plena disputa del playoff de promoción de ascenso y su andadura en esta fase ha comenzado bien. El domingo recibe al Nantón para jugar el partido de vuelta tras haber logrado vencer en la ida por 1-2. De lograr pasar de ronda, los carnotanos estarían a tan solo dos encuentros de conseguir su objetivo.
A pesar de estar luchando por el ascenso, la meta que se había marcado la directiva del Lira, completamente renovada esta temporada, era conseguir el título liguero. Un mal inicio de campaña propició la marcha del entrenador y que Javier González, que también ejerce de vicepresidente, cogiera las riendas del equipo. Desde entonces, la trayectoria del Lira fue ascendente: «Fomos de menos a máis. Fixemos unha terceira volta na que non perdemos ningún partido e tan só encaixamos catro goles», declaró el míster.
Cambio de mentalidad
González destaca que basó gran parte de su trabajo en cambiar la mentalidad de sus jugadores, consiguiendo que «os mozos teñan unha actitude gañadora. Estamos moi orgullosos da xente que temos».
Por otra parte, tanto el entrenador como los jugadores sabían tras la llegada de Javier González al banquillo, que alcanzar al líder de la competición, y finalmente campeón, el Muxía, estaba fuera de su alcance: «Non era posible gañar o título, pero si xogar a promoción. Por iso adestramos para rematar fortes a liga e o conseguimos facendo unha volta bestial, remontando 11 puntos ao segundo, que nos serviu de pretempada para chegar moi ben ao playoff».
Compromiso de todos
La buena dinámica ha favorecido que todos los integrantes del Lira estén comprometidos con el proyecto deportivo. En esta categoría, en la cual el deporte se practica por afición, es muy difícil compaginar horarios de entrenamientos, trabajo y clases: «O único día que nos xuntamos todos para adestrar é o venres. É complicado, xa que nun día non podes dedicar todo o tempo ao traballo físico nin a preparar o encontro da fin de semana», apunta González, que algunos partidos llegó al terreno de juego con tan solo 11 o 12 jugadores.
«É un sacrificio para todos, pero gusta moito e máis se os resultados acompañan. Hai euforia e vese ao equipo implicado. Ademais é un gran grupo de amigos», destaca el preparador, quien también apunta estar «moi contento con todos os patrocinadores que colaboran con nós. A xente acudiu á nosa chamada, algunha incluso tivo que quedar fóra».