Según un estudio, 18.000 vecinos soportan niveles acústicos elevados por el tráfico

La Voz

BARBANZA

19 feb 2017 . Actualizado a las 05:00 h.

La normativa autonómica desarrollada en el 2015 establece en sus disposiciones la elaboración de unos mapas de ruido en torno a las principales infraestructuras con el objetivo de establecer los niveles sonoros a los que está expuesta la población e identificar aquellos puntos en los que deben plantearse planes de acción para prevenir, reducir o evitar las molestias y efectos nocivos derivados de la exposición al ruido del tráfico. La comarca también ha sido objeto de ese estudio autonómico y, según sus conclusiones, unos 18.000 vecinos de la zona que viven próximos a las principales arterias viarias sufren un exceso de ruido.

Para elaborar ese mapa, se estudiaron distintos puntos de la autovía de Barbanza y de las carreteras comarcales AC-550 y AC-305, y es la población que vive en torno a esas vías de comunicación la que convive con un exceso de volumen. Además de estimar la cifra de ciudadanos afectados por el ruido procedente del constante paso de coches por estas infraestructuras, el estudio también establece qué grado de afección se da en cada tramo, de manera que, por ejemplo, los niveles sonoros más elevados se registran a orillas de la AG-11, tanto por el volumen de tráfico como por la mayor presencia de vehículos pesados.

Por su parte, en los dos viales comarcales hay un mayor número de vecinos afectados, pero el volumen acústico que soportan es menor al registrado a orillas de la autovía. De hecho, de los más de 18.300 barbanzanos que, según el estudio elaborado por la Xunta, se ven obligados a convivir con un exceso de ruido, apenas el 6 % soporta el nivel más alto.