Aunque la lucha por la eutanasia sigue, el nuevo colectivo ayudará a los vecinos a morir sin dolor
15 ene 2017 . Actualizado a las 05:10 h.Después de años de lamentos y peticiones, siguiendo la estela que había empezado a dibujar la travesía reivindicativa de Ramón Sampedro, al fin sus amigos de Xuño pudieron ayer rendirle el mejor de los homenajes posibles. Con motivo de las jornadas que cada año tienen lugar en esta localidad, coincidiendo con la fecha en la que el tetrapléjico sonense decidió poner fin a su viaje en este mundo, aquellos que un día se comprometieron a continuar su lucha presentaron Dereito a Morrer Dignamente Barbanza. El colectivo nace con el fin de asesorar y ayudar a las personas que, como Sampedro, quieren que su sufrimiento termine.
Tal y como quedó de manifiesto ayer, en la casa de cultura de Xuño, aunque el derecho a la eutanasia sigue siendo el gran reto, ante las reticencias mostradas por el Gobierno central, lo que toca es hacer el mejor uso posible de los derechos que tienen los ciudadanos. De explicarlos se encargó Emilia Irimia, presidenta de DMD Galicia. Destacó que, los enfermos terminales pueden, según la ley aprobada en el 2015, «elixir unha morte digna, sen sufrimento, rexeitando incluso determinados tratamentos e solicitando a sedación paliativa».
Eso sí, recordó la batalla que emprendió en su día Ramón Sampedro para asegurar que la lucha por la eutanasia continúa: «Sabemos que hai unha porcentaxe moi importante de cidadás españois, cifrada nun 97%, que están a favor, pero existe unha forte oposición por parte da Igrexa e falta o apoio político».
Un documento vital
Emilia Irimia instó a todos los presentes a hacer uso del documento de instrucciones previas, conocido como testamento vital, para garantizar que las últimas voluntades se cumplan aunque la persona en cuestión esté incapacitada para tomar una decisión en la recta final de su vida. El proceso a seguir fue detallado por María Quintano, la trabajadora social del hospital comarcal encargada del nuevo servicio que, a instancias de DMD Barbanza, se puso en marcha a comienzos de diciembre.
El acto contó también con la presencia de Marina Iglesias Gallego, doctora del complejo sanitario de Oleiros que ilustró a los presentes sobre la diferencia entre la medicina reglada y los cuidados paliativos que hacen posible una muerta digna y sin dolor. En representación de DMD Barbanza intervino Sara Moure, mientras que otro de los impulsores de este colectivo, Xosé Lois Villar, ejerció de presentador. El coro Voces de Sartaxas puso el colofón.
Los amigos de Ramón Sampedro volverán a reunirse hoy, aunque en un escenario diferente, la playa de As Furnas. Allí, donde el homenajeado sufrió el accidente que lo dejó postrado en una cama, volverán a recordarlo leyendo sus versos. También verán cómo el mar que se llevó las ganas de vivir de Sampedro arrastra claveles rojos.