Lógico e ilógico

Alicia Fernández LA CRIBA

BARBANZA

10 dic 2016 . Actualizado a las 05:00 h.

Por Boiro anda el gallinero alborotado. En esta ocasión por causa de la pretensión del Concello de retirar la exención del IVTM (popularmente conocido como impuesto de rodaje) a los vehículos de más de 25 años. Los afectados, unos cuatrocientos en Boiro, disfrutaban de una exención -al igual que en la mayoría de los municipios, aunque en algunos se está ya hablando de lo mismo- en el impuesto.

Como estamos ante una cuestión discutible variará nuestra opinión según la trinchera desde la que se mire. Pero permítanme una reflexión tirando de lógica: el impuesto municipal de rodaje, con variaciones según la potencia, no se fija en función de la renta o la actividad. Es un impuesto que grava directamente la tenencia de un vehículo en base a la necesaria disposición y mantenimiento de una red viaria por la que circular. Por tanto, mi posición en este caso es del lado del gobierno, pues considero un agravio comparativo que la mayoría pague y una minoría no, cuando disfrutan de los mismos beneficios.

Que esos vehículos los tienen las personas con menos recursos me parece un argumento de partida no contrastado y que a buen seguro no se cumple en bastantes casos. Pero si vale para este caso tiene que valer para el resto o sería una injusticia.

Lo ilógico esta semana está marcado por la increíble peripecia de unos vecinos de Ponte Barbanza. Que en pleno siglo XXI vivan una situación como la de Chicago en los años 20 debería sonrojar a responsables políticos, judiciales y a las fuerzas del orden. Si el sistema no puede enderezar un entuerto como este, es un mal sistema.