Un arenal deteriorado por la acción del hombre

ANA MOAS RIBEIRA / LA VOZ

BARBANZA

Los bañistas se quejan por la escasez de servicios y por su mala distribución

22 jul 2016 . Actualizado a las 05:00 h.

Es media mañana. La marea está baja en la playa de Testal, una de las pocas pertenecientes al ayuntamiento de Noia, y su impresionante arenal queda prácticamente al descubierto, llegando casi al medio de la ría. Los mayores pasean sobre su arena fina y blanca que se extiende a lo largo de 1.300 metros, mientras los niños juegan en la orilla. Un magnífico lugar, si no fuera por el deterioro que ha sufrido con el paso del tiempo y bajo la mano del ser humano.

Este bello emplazamiento no tiene pérdida, está perfectamente señalizado y tiene fácil acceso, tanto en coche como a pie, si bien las pasarelas o escaleras de que dispone para llegar hasta la arena son escasas. La carretera también cuenta con partes descuidadas, llenas de gravilla y piedras pequeñas o boquetes en el suelo que dificultan la circulación de los vehículos. Sin embargo, los problemas surgen con el resto de prestaciones que se pueden encontrar allí: pocas y mal distribuidas.

Papeleras en la carretera

No hay sanitarios por ningún lado y tan solo existen dos duchas operativas colocadas en el lado norte de la playa, dejando a la zona sur sin servicio alguno. Las pocas papeleras y contenedores de los que se dispone en su larga extensión están emplazados fuera de la zona de baño, en la carretera. Además, por la localización del arenal, las corrientes marinas y del río suelen arrastrar botellas, restos de bolsas o ramas a su paso, que luego quedan estancadas en la arena. Asimismo, en la orilla se acumulan grandes cantidades de algas y conchas rotas, motivo de queja por parte de algunos asiduos.

La caseta de vigilancia tiene una pequeña torre de control y está descuidada en su totalidad. Tampoco hay socorristas que supervisen a los bañistas, algo fundamental, teniendo en cuenta las corrientes que existen en esa área, al situarse cerca de la desembocadura de dos ríos.

Más allá la zona de baño, el espacio de ocio se amplía para los deportistas. Una pista de tierra para los corredores, una cancha de baloncesto y un campo de fútbol completan los servicios.