El «Samtorum» voló en la Frinsa

Ramón Ares Noal
MONCHO ARES RIBEIRA / LA VOZ

BARBANZA

m. ares

El barco del Náutico de Vilagarcía fue el primero en entrar en meta en la clase regata y en la general, el «Somni» en crucero y el «Sara» en crucero-regata

26 jun 2016 . Actualizado a las 05:15 h.

La XVI Regata Frinsa-Trofeo Ramiro Carregal Rey reunió ayer en aguas de Ribeira a cuarenta embarcaciones que tuvieron la oportunidad de disfrutar de una buena mañana para la vela. Finalmente, el comité apostó por el recorrido más corto, de los tres que barajaba, de 8,28 millas de distancia, con salida del puerto de Santa Uxía, a cuya altura se situó un pequeño desmarque para, a continuación dirigirse a la isla de Rúa, para continuar a la baliza del Ter y vuelta al punto de salida.

A lo largo de toda la carrera, la intensidad media del viento fue de 18 nudos, con picos que superaron los 25, predominando en todo momento dirección nordeste, aunque con cambios puntuales que pusieron a prueba la capacidad de las tripulaciones, algunas de las cuales tuvieron dificultades con el espináquer.

Con esa intensidad, las embarcaciones volaron sobre la marejadilla que se mantuvo en todo el recorrido, pero fue el vilagarciano Grupo Santorum&Martínez, del Club de Mar de Vilagarcía, con Javier Durán a la caña, el primero en llegar a la línea de meta, proclamándose campeón de la clase Regata y de la general.

El velero se estrenaba en el historial de esta regata, no así algunos de sus tripulantes que formaron parte del Ziralla Primero, de Ramón Barreiro que es el único que puede presumir de ganar dos ediciones consecutivas y que ayer hizo un cuarto lugar en regata y acabó sexto en la general.

Tampoco anduvo fino el Arosa VI, de José Luis Torres Colomer, que una mala salida le impidió luchar por un podio que, no obstante tuvo cerca, al entrar cuarto en crucero.

El Piko Norte de José Manuel castro no pudo doblegar al Somni de Bande, pero por muy poco.

Para el impulsor de la regata, Ramiro Carregal, los resultados de ayer fueron sin duda los más deseados, porque ganaron barcos de la entidad de su ciudad natal (Vilagarcía), del de su ciudad adoptiva (Ribeira) y del de Portosín, con el que mantiene una estrecha amistad.