Voluntarias al servicio de la formación

Ana Gerpe Varela
A. Gerpe RIBEIRA / LA VOZ

BARBANZA

Trini Otero y Celia López, en la base de Protección Civil de A Pobra, a la que pertenecen.
Trini Otero y Celia López, en la base de Protección Civil de A Pobra, a la que pertenecen. Marcos creo

Trini Otero y Celia López son médicas e imparten los cursos sanitarios impulsados por Protección Civil de A Pobra

23 may 2016 . Actualizado a las 05:00 h.

Con una gran vocación de servicio y conscientes de la importancia de poseer conocimientos básicos de primeros auxilios, Trini Otero, anestesista, y Celia López, médica del trabajo, no dudaron en sumarse al proyecto que, hace un año, les expuso el responsable de Protección Civil de A Pobra, Xosé Narciso Pérez, para reactivar la agrupación e incluirlas a ellas como voluntarias en el apartado de formación. Fue así como se convirtieron en integrantes, aportando sus conocimientos no solo para impartir cursillos a los miembros del grupo, sino también para extenderlos a otros colectivos sociales, como docentes, alumnos y vecinos en general. En el caso de Trini Otero, la colaboración con Protección Civil de A Pobra viene por partida doble ya que Vitoriano, su marido, también coopera con el colectivo.

Ambas afirman que el proyecto de Xosé Narciso Pérez les pareció interesante. Celia López explica que cuando se puso en marcha la agrupación se impartieron a los miembros unas clases de iniciación sobre urgencias médicas. Asimismo, añade que ambas van a participar en un curso que en breve recibirán los voluntarios. Además, comenta Trini Otero, «ellos plantean las dudas que les surgen y son cuestiones que analizamos. Si está en nuestra mano, los ayudamos para que estén más seguros a la hora de desempeñar su actividad».

Otero y López subrayan el intenso trabajo que realizan los integrantes de Protección Civil: «Pasan muchas horas de guardia», indica Celia López, quien también manifiesta: «Están preparados para atender múltiples emergencias. Los integrantes del grupo muestran mucho interés y siempre procuran asistir a los cursos que se hacen».

Las dos médicas, que llevan dos décadas residiendo en la comarca, destacan la labor altruista de los voluntarios, capaces tanto de atender a personas que han sufrido un accidente de tráfico como de extinguir un incendio o de socorrer a un vecino que se encuentra en apuros. Sin embargo, creen que esta labor no siempre es reconocida por la ciudadanía: «La gente desconoce la importancia del trabajo de los voluntarios, la gran cantidad de incidencias que resuelven cada jornada», apunta Trini Otero.

Clases para vecinos

El próximo proyecto en el que están inmersas, siempre de la mano de Protección Civil, consistirá en impartir, en diferentes localidades de A Pobra, charlas para que los ciudadanos sepan qué es lo que no deben hacer ante pequeñas heridas, quemaduras u otros accidentes de carácter doméstico. De lo que se trata es de que los residentes sepan cómo actuar para resolver pequeñas incidencias. Una vez más, los conocimientos de estas profesionales se ponen al servicio de una gran mayoría y Protección Civil muestra su capacidad de ser mucho más que un cuerpo al que se recurre en caso de apuro.

En esta misma línea, Trini Otero y Celia López han estado impartiendo cursillos a docentes y estudiantes pobrenses sobre reanimación cardiopulmonar. Los destinatarios fueron alumnos de segundo de ESO del instituto. Ambas indican que se les transmitieron nociones básicas «que todo el mundo debería conocer». En este sentido, Celia López concreta: «Son aspectos que en otros países, como Suiza o Francia, figuran como materias curriculares, pero en España no acostumbra a hacerse».

Fue un curso práctico en el que se emplearon tres maniquíes y en el que todos los jóvenes tuvieron ocasión de participar. Ellas se sienten satisfechas y creen que los chicos también quedaron muy contentos. La intención es que este tipo de actividades se repitan anualmente «para reciclar conocimientos».

Precisamente, con el fin de actualizar las nociones aprendidas, las dos profesionales también impartieron clases de reanimación cardiopulmonar a docentes de primaria. Aseguran que en el día a día se producen incidentes, un golpe fortuito en la cabeza o un atragantamiento, en los que una primera asistencia básica puede ser determinante.