A diferencia de su homólogo de A Pobra, Manuel Ruiz no es partidario de retomar el antiguo proyecto
06 may 2016 . Actualizado a las 05:10 h.«É un proxecto interesantísimo para A Pobra e intentaremos que a Xunta o saque do caixón no que o meteu». Con estas palabras, el gobierno pobrense daba su apoyo a una iniciativa del BNG que desempolvaba el macropolígono industrial entre A Pobra y Ribeira sobre el que corrieron ríos de tinta en su momento y finalmente quedó en nada. Sin embargo, todo apunta a que la propuesta quedará nuevamente en lo mismo, papel mojado, toda vez que en el término ribeirense no existe el mismo interés por impulsar la actuación. No en vano, el ejecutivo local lo ve «inasumible».
El alcalde, Manuel Ruiz Rivas, recordó que el Concello está trabajando ya en la ampliación de suelo industrial dentro del término municipal, concretamente en la zona de A Cañoteira y, al parecer, está prevista una próxima reunión con la Xunta para abordar este asunto.
En cuanto al macropolígono, considera que es inasumible tanto en términos económicos como ambientales y de tiempo de ejecución, sobre todo teniendo en cuenta que está previsto en un lugar próximo a la reciente ampliación del parque empresarial de A Tomada, en el que todavía quedan parcelas disponibles.
Tampoco la patronal
No es el alcalde ribeirense el único que rechaza el macropolígono. Tampoco los empresarios están por la labor de embarcarse en esa lucha. Su presidente, Antonio Miranda, indicó al respecto que su preocupación ahora es sacar adelante la ampliación de suelo industrial en el municipio: «Imos dar moita guerra a partir de agora con este asunto porque os socios testán presionando, teñen unha necesidade urxente de espazo para ampliar as súas empresas».
Apuntó las reticencias de los emprendedores ribeirenses a irse a otro municipio y señaló las buenas comunicaciones del proyecto de A Cañoteira por enlazar directamente con la autovía y la salida hacia el puerto.