La clave está en el aumento del precio medio

M. varela ribeira / la voz

BARBANZA

03 may 2016 . Actualizado a las 05:05 h.

Los sectores primarios atraviesan un momento crítico, tanto la pesca como la ganadería, lo que constituye un auténtico problema porque tienen un importante peso específico en la economía de la comarca. Como dato basta decir que la pesca supone en Ribeira el 27,8% del producto interior bruto. Por eso, el descenso en la facturación de la lonja ribeirense tiene una importancia capital y es un motivo de preocupación.

¿A qué se debe el aumento de los ingresos?

El incremento del precio medio del pescado subastado en Ribeira es lo que ha permitido que, pese a la reducción del 15% en las descargas, la facturación se haya incrementado un 24%. El valor medio del conjunto de especies vendidas en la rula durante el primer trimestre del 2016 fue de 1,56 euros el kilo, mientras que en el mismo período del 2015 se situó en 1,07.

¿Qué especies se incrementaron?

Lo cierto es que se observa un ascenso en el valor medio de compra de todas ellas, aunque destacan especialmente algunas como, en el caso del pescado, la pescadilla de la flota de artes varias. El pasado ejercicio el promedio de comercialización fue de 2,55 euros, mientras que este año se sitúa en 3,26. En lo que se refiere al marisco, ha tenido muy buen comportamiento la almeja babosa, cuatro euros por encima del año anterior en el precio medio alcanzado en subasta. Asimismo, cabe destacar que en el arranque de este ejercicio ha pasado por el recinto ribeirense más cantidad de pulpo y, además, el valor ha subido. Se trata de un molusco que también tiene una destacada importancia.

¿La afluencia de compradores influye?

La asistencia de compradores a la rula de Ribeira tiene una gran importancia a la hora de fijar los precios y, en este sentido, cabe señalar que el administrador de la instalación, José Manuel Orellán, indica que cada vez es más numerosa la presencia de profesionales que intervienen en las subastas. Asimismo, comenta que los mayoristas que acuden van al alza y este es un elemento vital porque adquieren grandes cantidades de producto, lo que motiva que pujen por el mismo y que las cotizaciones suban. Una de las particularidades de la rula ribeirense es que también se venden muchos lotes pequeños a minoristas, una circunstancia que no se da en otros recintos con un movimiento de mercancías similar al de Ribeira.