Adrián Parada, estudiante
28 nov 2015 . Actualizado a las 05:00 h.Siguiendo la tradición familiar, el ribeirense Adrián Parada tomó la decisión de matricularse en la Escuela Náutica. Su hermano José Ángel, recién enrolado en un atunero, le recomendó que diese este paso. «O mundo do mar ten bastante saída, o que buscamos todos os que estamos aquí é conseguir traballo unha vez rematemos», asegura el joven mientras se saca las gafas de seguridad necesarias para trabajar en el taller. Sobre el nivel educativo del centro defiende que salen perfectamente preparados: «Sabemos que o mar é complicado, pero os profesores fan o máximo posible para botarche unha man».