La pasividad ante el aumento de productos falsificados indigna a los comerciantes de Noia

Marta Gómez Regenjo
Marta Gómez NOIA / LA VOZ

BARBANZA

La venta de las falsificaciones se eleva en las fiestas.
La venta de las falsificaciones se eleva en las fiestas. Marcos Creo< / span>

La patronal noiesa busca hacer fuerza con otras asociaciones para obligar a las autoridades a tomar cartas en el asunto

27 ago 2015 . Actualizado a las 05:00 h.

Semanas antes de que arrancasen las fiestas de San Bartolomeu, representantes de la patronal, del Concello y de la Policía Local de Noia se reunieron para hablar de una cuestión que preocupa, y mucho, al comercio noiés: la venta de productos falsificados en los puestos ambulantes. La asociación de empresarios veía venir el problema, y sus temores se cumplieron para indignación del sector, cuyo malestar se ve incrementado por la pasividad de las autoridades ante un problema que no es exclusivo de la villa noiesa.

El enfado de los comerciantes se manifestó por boca del presidente de Noia Histórica, Francisco Pérez, que, aún reconociendo que la situación es compleja, ayer exigía una solución: «No se está haciendo nada, no se está actuando y los comerciantes están realmente indignados. Es un problema difícil de atajar pero hay que solucionarlo porque cada vez es más grave y hace mucho daño al sector». Consciente de que desde Noia poco se puede hacer al respecto, la patronal se dirigirá a la Federación de Empresarios de Barbanza (FEB) para que esta se remita a las autoridades competentes, incluso a la Delegación del Gobierno si es preciso, para que se tomen medidas contra la venta de productos de marca falsificados.

Todas las ramas

Pérez destacaba que la situación afecta a todas las ramas del comercio, desde el textil a los bolsos y complementos o el calzado deportivo, por lo que hace un llamamiento a la unidad del sector.

En este sentido, el presidente de Noia Histórica anima a otras asociaciones de empresarios a sumarse a esta lucha para que se actúe contra una práctica «que va más y que queda impune». También apela a la ciudadanía: «La gente tiene que ser consciente de que la compra de esos productos causa un gran daño».