Tuvieron que recurrir «in extremis» a los clubes náuticos para seguir adelante con el programa de travesías gratuitas por Barbanza
01 jul 2015 . Actualizado a las 05:00 h.Hace unos días fue el Concello de Muros el que tuvo un encontronazo con Portos debido a los permisos para la instalación de los chiringuitos en el relleno de la localidad y ahora son los propietarios del Joaquín Vieta, un grupo de noieses que restauraron de modo altruista el balandro, los que cargan contra el organismo público dependiente de la Xunta, reprochándole su «desidia» hacia una joya patrimonial, pues se trata del velero más antiguo de Galicia que a día de hoy surca las aguas. Aseguran tener que estar continuamente superando los obstáculos que el ente pone en su camino.
El último salto fue el que tuvieron que dar hace solo unos días. Pretendían atracar en uno de los pantalanes del puerto de Rianxo para iniciar desde allí las rutas incluidas en un programa apadrinado por la mancomunidad Arousa Norte con el fin de poner en valor la cultura marinera. De hecho el lunes, cuando tuvo lugar la presentación oficial de las travesías en la cuna de Castelao, las autoridades y los medios estaban convocados para el muelle, pero el Joaquín Vieta no llegó al punto de encuentro, sino que se quedó en el club náutico.
La larga lista de documentos y permisos exigidos por Portos está, según los dueños del balandro, detrás de este cambio de planes: «Tivemos que recorrer no último momento a unha entidade privada e pagar a cota, co prezo especial que nos fixeron, porque nos pedían permisos e seguros especiais imposibles de conseguir», explicó Juan López Oviedo, presidente de la asociación propietaria del barco.
De hecho, este colectivo ha llegado ya a acuerdo con el club náutico de Cabo de Cruz, siguiente parada del velero, y espera firmar también convenios con A Pobra y Ribeira, por donde continuarán las rutas.
El problema es que este contratiempo se suma a otro anterior que tuvo la asociación: «Pedimos un lugar de atraque no Freixo, co fin de que a xente tivera a oportunidade de ver o barco desde terra e empregalo incluso para concertos ou actividades culturais, pero nin sequera recibimos resposta de Portos». De hecho, el Vieta permanece desde hace tiempo fondeado cerca de Portosín.
La asociación está convencida de que la Xunta no le está dando al velero la importancia que realmente tiene.
El ente público asegura que es una cuestión de seguridad
No hay ánimo alguno, por parte de Portos de Galicia, de poner obstáculos a la labor altruista que realiza la asociación Joaquín Vieta. En eso insistieron ayer fuentes del organismo público, que aseguraron que al velero se le exigieron una serie de seguros y permisos con el fin de garantizar la seguridad de los viajeros que lo utilicen durante su estancia en la villa rianxeira.
Desde el ente señalaron que en las rampas y escaleras existentes en puertos como el de Rianxo no se pueden realizar embarques de personas pues, de ocurrir algún percance, la responsabilidad recaería sobre el organismo dependiente de la Xunta. Añadieron que los clubes náuticos sí disponen de instalaciones adecuadas.
En cuanto a la posibilidad de que el velero pueda contar con una plaza de atraque en O Freixo, fuentes de Portos aseguraron que ahora el muelle no tiene espacios libres y que no existe a día de hoy previsión de que vaya a quedar algún hueco en breve.