La cifra de petroglifos inventariados en el territorio sonense se eleva ya a 260

Ana Gerpe Varela
A. Gerpe RIBEIRA / LA VOZ

BARBANZA

El Concello asegura que todo indica que puede haber otros tantos sin localizar

29 may 2015 . Actualizado a las 05:10 h.

Porto do Son es terreno de petroglifos. Raro es que vaya a realizarse una obra, el último ejemplo fue la construcción de la carretera de circunvalación de Portosín, y que no aparezca una piedra grabada. La cifra de elementos prehistóricos inventariados se eleva ya a 260. La redacción del plan general, explica el regidor, Luis Oujo, ha servido para catalogar muchos elementos que habían sido localizados por arqueólogos en investigaciones particulares, pero que no estaban debidamente identificados.

Por eso, fue necesario realizar una labor de campo, en el que un grupo de técnicos, conjuntamente con representantes de Patrimonio, supervisaron las estaciones e hicieron las comprobaciones oportunas para determinar si, efectivamente, reunían las condiciones para ser catalogadas.

Aunque un buen número de petroglifos ya estaban documentados, Luis Oujo manifestó que, con este trabajo de campo, se incorporaron unas sesenta piezas nuevas.

El regidor indica que es posible que haya otros tantos sin localizar todavía, pero señala que no se va a llevar a cabo ninguna intervención específica con el propósito de realizar nuevos hallazgos.

Mantenimiento costoso

Luis Oujo subrayó que el Concello sonense procura mantener en buen estado y debidamente señalizados aquellos conjuntos de grabados que se encuentran en los catálogos turísticos que edita el Concello, como son los de Baroña, Caamaño, Queiruga o A Silva.

Señaló que la realización de estas labores es costosa, por lo que descartó, salvo que haya nuevos hallazgos fortuitos, intentar la localización de otras estaciones.