La millonaria nueva lonja de Ribeira no despierta el interés del sector

María Hermida
maría hermida RIBEIRA / LA VOZ

BARBANZA

El nuevo edificio, que costó 14,7 millones, ya está terminado en su parte exterior.
El nuevo edificio, que costó 14,7 millones, ya está terminado en su parte exterior. carmela queijeiro < / span>

Nadie sabe explicar muy bien por qué, pero mientras en otros grandes puertos la cadena de la pesca se une para explotar las rulas, en Santa Uxía eso no ocurre

21 abr 2015 . Actualizado a las 18:16 h.

La nueva lonja de Ribeira es la inversión más cara de toda la historia de Portos de Galicia -costó 14,7 millones-. Es más, figura como una de las grandes obras en marcha en este momento en toda la comunidad. Supuestamente, se trata de una perita en dulce para vender en tiempos electorales. Pero nadie parece querer hablar demasiado de ella. El único peso pesado de la Xunta que se acercó a verla desde que el edificio está levantado fue, recientemente, Alfonso Rueda Y, para eso, hizo un recorrido rápido de veinte minutos por el edificio en una jornada en la que visitó más actuaciones. Esta situación, muy rara en un período en el que cada inversión, por mínima que sea, se vende hasta la saciedad, puede que tenga que ver con la poca empatía del sector pesquero con el ultramoderno edificio.

La de Ribeira es, actualmente, la única lonja gallega en manos de un Ayuntamiento. Desde Portos reconocen que se trata de una situación extraordinaria. Lo lógico sería pensar que, al cambiar de edificio, el sector pesquero haría lo mismo que ocurre en otros muelles importantes como Burela, Celeiro o también A Coruña, donde toda la cadena del mar se unió -desde armadores a comercializadores pasando por la cofradía y otros usuarios del recinto- para formar sociedades y gestionar los recintos de ventas.

Ni armadores ni vendedurías

Pero en Santa Uxía todo está muy frío, gélido casi. Distintos armadores consultados ayer, los más potentes en esta dársena, ni se plantean optar a la gestión. Varias vendedurías, tampoco. El pósito, de momento, ni pensó en ese asunto, y eso que la obra está a un paso de acabarse.

¿Por qué ocurre esto? Nadie sabe explicarlo con certeza. «Non sei que dicirche, este edificio fíxose de costas ao sector, a ninguén lle gustaba a ubicación nin outras cousas, non sei se será por iso», afirma Nacho Vázquez, presidente de la Asociación de Armadores de Ribeira. «¿Coller a nova lonxa? Non creo que ninguén pense niso. ¿Quen ten capacidade para asumir semellante cousa», se pregunta Manuel García, armador de Muros pero cuyos barcos están entre los que más descargas hacen en Ribeira. «Vexo a cousa moi complicada, terá que ser o Concello o que siga con ela», opina Manuel Blanco, un veterano comercializador.

El pesimismo con respecto al flamante edificio es grande. Encima, en el sector ha calado la frase dicha por el alcalde, Manuel Ruiz, en el último pleno, en el que apuntó que el concurso que hará Portos para buscar quien gestione la rula «vai quedar máis deserto que o Sáhara». Unos y otros repiten sus palabras.

Mala cosa

En la nueva lonja de Ribeira se gastaron casi 15 millones de euros. Puede que la inversión haya sido buena, mala o regular. El tiempo lo acabará diciendo, a buen seguro. Lo que está fuera de dudas es que el sector tiene en el edificio -sea mejor o peor, más acorde o menos acorde con sus gustos- una oportunidad para autogestionarse. Si al menos no se plantea este tema, mala cosa.

Portos espera a que le llegue un papel del Concello para sacar el concurso con la concesión

Portos de Galicia indicó hace meses que no esperaría a que terminasen las obras para sacar a concurso la concesión de la nueva lonja. Pero todavía no está en marcha ese trámite. ¿Por qué? Desde el ente público explicaron ayer que todavía no les llegó el papel del Concello de Ribeira renunciando a la gestión de este servicio para poder avanzar en este asunto. Indican que sin tener ese documento no pueden dar ningún paso adelante.

El Concello trató este asunto, el de renunciar a la concesión de la lonja para que pueda sacarse a concurso -un mero trámite porque, de momento, en la práctica la seguirá llevando- en una reunión del Consello Local de Pesca el día 27 de enero. Pero no lo tramitó en pleno hasta el pasado miércoles. Y Portos todavía no recibió el papel. Dicen que si se manda por la ventanilla única puede tardar hasta mes y medio en viajar hasta Santiago.