Pinchazos a móviles de narcos de Ribeira destaparon el caso de los once detenidos

Javier Romero Doniz
JAVIER ROMERO RIBEIRA / LA VOZ

OURENSE CIUDAD

CARMELA QUEIJEIRO

Las escuchas telefónicas a vecinos de Santa Uxía arrestados por tráfico de droga permitieron abrir el sumario contra la banda que planeaba raptar a un ourensano

18 ene 2015 . Actualizado a las 13:04 h.

El narcotráfico y la telefonía móvil son tan incompatibles como el agua y el aceite, sobre todo si el empresario de la droga cuenta con un amplio historial policial que lo hace estar bajo sospecha continuamente. Fue así, gracias a diferentes números de teléfono intervenidos en el 2014 que eran propiedad de varios narcos históricos de Ribeira, como se inició la investigación que permitió arrestar esta semana a los once integrantes de las dos bandas que pasaron el viernes a disposición judicial en la capital barbanzana. Se les acusa, entre otros delitos, de tráfico de droga y de planear el secuestro de un empresario ourensano.

El Equipo de Delincuencia Organizada y Antidrogas (EDOA) de A Coruña, hará en marzo un año, estaba inmerso en una investigación por tráfico de cocaína a media escala que instruía el Número 3 de Ribeira. El caso incluía el pinchazo de los teléfonos móviles de unos vecinos que, presuntamente, estaban orquestando un alijo considerable, según se recoge en el sumario judicial.

Causa paralela

Basta decir que estos sospechosos protagonizaban en ese momento otra investigación paralela que estaba en manos del Número 1 de Ribeira, y que se saldó, hará en febrero un año, con las detenciones, por parte de la Policía Nacional, de estos dos individuos -que cuentan con otros antecedentes pretéritos por los mismos hechos- y de otros presuntos colaboradores acusados de despachar, entre otras sustancias, más de medio kilo de coca a la semana.

Coincidiendo con el inicio del pasado verano se intervinieron diferentes llamadas a los citados narcos ribeirenses que tenían como destino, parece ser, a los integrantes de la banda que planeaba secuestrar en los próximos días a un tratante de ganado de Ourense. Fue en ese momento cuando las pesquisas del EDOA cambiaron de rumbo para iniciar la operación Parede, que apuntaba directamente a este grupo liderado, según fuentes judiciales, por Plácido Pereira, y que el viernes ingresó en prisión preventiva y sin fianza con cuatro de sus presuntos cómplices.

Pasaron los meses y el trabajo de los investigadores se fue encauzando gracias a las incontables horas de seguimiento de los sospechosos y a más pinchazos telefónicos. Esto habría permitido a los agentes conocer de primera mano el catálogo delictivo de esta organización que, parece ser, era tan amplio como lucrativo y descarado. Y es que los acusados no dudaban, según parece, en simular operaciones de narcotráfico para robar el dinero a sus compradores.

El desenlace

Habría sido una de estas sustracciones la que motivó un tiroteo en una casa de Muxía, el 4 de diciembre pasado, en el que resultó herido de bala el dueño de la vivienda que, parece ser, iba a comprar coca, y uno de los integrantes de la banda de Pereira que, según parece, se desplazó a esta localidad de A Costa da Morte para transportar la mercancía falsa.

El resto de la investigación trascendió esta semana con las detenciones de Plácido Pereira, seis de sus compinches, y cuatro integrantes de la familia de Muxía, que no están relacionados con el plan de secuestro.