Cultivan distintas especies en una finca cedida por un particular y convertida en huerto ecológico por Contacto
10 oct 2014 . Actualizado a las 05:00 h.A través de los bancos de alimentos, hasta las despensas de las familias sin recursos llegan diversos comestibles, fundamentalmente cereales, legumbres, leche y conservas. Pero hay un producto fundamental para una dieta equilibrada que, por razones obvias no llega a los almacenes desde los que se distribuye la comida, las hortalizas. Para cubrir este vacío, Contacto ha puesto en marcha un huerto ecológico en Boiro, una experiencia que nace con el fin de crecer e incluso ser exportada a otros lugares.
Este huerto funciona desde hace unos tres meses en una finca que una boirense ha cedido, inicialmente por período de un año, a la oenegé. En ella, una decena de familias cultivan y cuidan diversas especies. De hecho, han recogido ya los primeros frutos: «Ya se han consumido pepinos, lechugas y nabizas, por lo que sentimos una emoción salvaje», explicó la responsable de Contacto.
Espacio para más
Desde esta asociación se hace hincapié en el hecho de que, pese a que se trata de una superficie limitada, todavía hay espacio para alguna familia más que esté interesada en cultivar. Aunque garantizar una dieta sana es el objetivo principal de esta iniciativa, en ella también entran en juego la interculturalidad, las ventajas de compartir espacios y el aprendizaje. De hecho, un monitor acude de forma periódica a la finca para enseñar a los niños los procesos del cultivo ecológico.
Otro aspecto fundamental de esta experiencia es que no ha supuesto el manejo de dinero alguno, pues tanto las herramientas como las semillas han sido donadas. Ahora Contacto, que está dispuesto a ampliar el huerto con más fincas, busca también apoyo para la instalación de un invernadero que permita garantizar los cultivos en invierno.