Los mejilloneros denuncian de nuevo sabotajes en sus bateas

María Hermida
María Hermida RIBEIRA

BARBANZA

Bateeiros de cinco puertos arousanos acusan a los trueleiros de A Illa de cortarles cuerdas y provocar que el bivalvo vaya al fondo

20 sep 2014 . Actualizado a las 05:00 h.

El conflicto entre los titulares de 800 bateas de la ría de Arousa y el colectivo de trueleiros de A Illa, que usa las estructuras de las mejilloneras para realizar su trabajo, parece recrudecerse. Ayer, bateeiros de A Pobra, Boiro, Rianxo, Vilanova y Vilaxoán emitieron un comunicado en el que acusan a «unha parte» de los mariscadores isleños de trabajar como furtivos sobre bateas a las que tienen vedado el acceso, de ocasionar importantes pérdidas a los propietarios de estas y de cometer «sabotaxes».

El problema llega «nesta época do ano, cando o mexillón acada a súa madurez. Debido aos episodios tóxicos, que cada ano son máis prolongados, o mexillón non pode ser comercializado no seu momento, polo que corre un grave risco de desprendemento», explica el comunicado de los mejilloneros. Esa circunstancia, sumada a la acción de los trueleiros, «está provocando graves perdas, que poden acadar o 40 % da producción anual». Para «intentar salvar o mexillón», 800 bateeiros han contratado a una empresa de vigilancia que les cuesta 100.000 euros al año.

«Ante o incumprimento reiterado dos trueleiros», se decidió intensificar el servicio de vigilancia de las bateas. «Iso descolocounos», explicaba ayer un bateeiro barbanzano. Y los trueleiros furtivos, señala el comunicado, intensificaron sus ataques a las bateas. Se traducen estos en cuerdas cortadas.

Intentos de abordaje

«A isto hai que sumarlle intentos de abordaxe á lancha de vixilancia e ameazas incluso de morte», dice el comunicado de prensa hecho público ayer.