Ruiz ve viable cambiar el PXOM para hacer el complejo de lujo, pero impone condiciones

María Hermida
María Hermida RIBEIRA / LA VOZ

BARBANZA

MATALOBOS

No permitirá aumentar la edificabilidad y pide respeto a los recursos ambientales

24 abr 2014 . Actualizado a las 07:00 h.

La empresa Xarás S.L., propietaria de la conocida finca ribeirense La Soledad, presentó a la Xunta y al Concello un proyecto para construir un complejo con cien chalés, un hotel de lujo y dos campos de golf en el terreno. Para poder levantar todo lo que la firma pretende es indispensable cambiar el Plan Xeral de Ordenación Municipal (PXOM) de Ribeira, ya que donde se quieren hacer las casas es suelo rústico. Dicen los promotores que no buscan convertirlo en urbanizable así como así, sino simplemente trasladando la edificabilidad que tienen en otra parte de la finca a esa zona. Sea como fuere, el caso es que se necesita hacer un cambio puntual de la norma. Y eso pasa, en primer lugar, por que el Ayuntamiento acepte. ¿Qué dice el gobierno de Ribeira? El alcalde Ruiz Rivas ve viable modificar el plan urbanístico. Pero impone dos condicionantes.

El primer requisito que pone Ruiz puede decirse que cae de cajón. Señala el regidor que no va a tirar hacia adelante con ningún proyecto que no preserve los recursos medioambientales de Ribeira. Al preguntarle a los responsables de la firma Xarás S.L. al respecto, indican que la finca no está afectada «ni por el parque natural ni por castros ni por otros elementos». De ahí que ellos concluyan que no se toca a ningún recurso.

«Claro que se cumple»

Ruiz pone otro condicionante. No quiere que se aumente la edificabilidad en La Soledad. El alcalde no va más allá, no especifica si a tenor del proyecto presentado en el Concello ese requisito se cumple o no. Por tanto, queda esa duda en el aire.

Quien sí lo tiene muy claro es la promotora. Jaime Fernández-Bugallal, portavoz de Xarás S.L., insistía ayer en que «claro que se cumple ese requisito, en ningún caso se pretende aumentar nada, solamente queremos trasladar la edificabilidad que tenemos en una parte de la finca al lugar donde se pretende construir la residencia. Es algo que únicamente nos afecta a nosotros, no a ningún otro vecino ni a nadie más. Es una modificación simple», enfatizó.

Pese a sus palabras, habrá que ver si finalmente el ejecutivo opina lo mismo. De momento, lo único que está claro son los requisitos que pone Ruiz. Eso sí, el alcalde también manifestó que, en el caso de cumplirse las condiciones citadas -preservar los recursos y no aumentar la edificabilidad- se compromete a «ayudar a implantar este proyecto en Ribeira».

Al margen de lo que pueda suceder, lo que tiene claro todo el mundo, incluso los promotores del complejo de lujo, es que estos trámites no son, ni de lejos, rápidos. Primero tendría que validar el Concello la modificación del PXOM y luego autorizarla también la Xunta.