Ni el clásico del fútbol pudo con el fervor religioso que se vive en Ribeira
BARBANZA
Numerosos fieles, sobre todo mujeres, asistieron a la procesión del Paso
18 abr 2014 . Actualizado a las 07:00 h.El día estaba marcado en rojo en el calendario de muchos fieles. Es la procesión del Paso, en Santa Uxía, uno de los actos religiosos más emocionantes de la Semana Santa barbanzana. Aunque en la agenda de los forofos del fútbol también estaba subrayada la final de Copa del Rey, ni los regates de Messi y Bale consiguieron eclipsar el recorrido. Eso sí, las mujeres ganaron por goleada a los hombres en asistencia, tal y como se refleja en las muchas imágenes que hoy quedan para el recuerdo.
No es la primera vez que la procesión ribeirense coincide con el clásico del fútbol. Ocurrió ya en el año 2011 y en aquella ocasión sí que fueron muchos los seguidores que se llevaron el transistor pegado a la oreja o que, incluso, se asomaban a los escaparates de las tiendas de electrodomésticos para ver el resultado en los televisores expuestos. Otros, preferían ver la procesión desde el balcón de casa con un ojo pegado a la pantalla y otro a la calle.
Una nueva cruz
Aunque el fervor religioso ganó a la afición por el deporte rey, la presidenta de la asociación Alfaia, Mari del Carmen García Torrado, dijo que les había costado mucho encontrar a costaleros dispuestos a llevar la imagen del Paso el miércoles por la noche. Aún así, recalcó que la procesión volvió a ser todo un éxito este año y que «todo salió de maravilla».
La entidad lleva desde hace tres años encargándose de organizar este acto religioso que en esta ocasión ha añadido como novedad una nueva cruz. Se trata de un estandarte que fue realizado por los socios de la entidad.
El balance
Tal y como informaron desde Alfaia, y a pesar de la cita deportiva, un total de setenta cofrades y quince costaleros participaron finalmente en el recorrido. Las suaves temperaturas que se alcanzaron en la ciudad de Ribeira el miércoles por la noche animaron a muchos vecinos y visitantes a unirse a la multitud, también sobre la marcha.
Precisamente el buen tiempo está contribuyendo a que la Semana Santa barbanzana sea una de las más esplendorosas que se recuerdan. Hay mucho trabajo detrás de cada procesión y la ausencia de lluvia las hace brillar como se merecen después de meses de esfuerzo.
Está previsto que los actos alcancen su máxima expresión este fin de semana a lo largo de toda la comarca. Muchos miran al cielo para que las nubes no hagan su aparición y empañen la celebración. Por delante queda una completa programación que cumplir.
Un total de setenta cofrades y quince costaleros participaron en el recorrido